Foto: Especial El plan cultural de la coalición frentista también pretende hacer de las industrias culturales un eje estratégico de la política económica  

El candidato presidencial de la alianza Por México al Frente (PAN, PRD y MC), Ricardo Anaya, presentó esta mañana sus ocho ejes para la integración de una política cultural.

 

Entre ellos destacan la promoción de otras formas de expresión artística como el diseño, las culturas populares, las artesanías y la gastronomía, y no centrar el impulso sólo en las bella artes.

 

El plan cultural de la coalición frentista también pretende hacer de las industrias culturales un eje estratégico de la política económica.

 

Los ocho ejes, son: 1) Política integral de cultura, que no esté limitada a las bellas artes; 2) Descentralización, que no mantenga el foco en la ciudad de México; 3) La cultura como motor del desarrollo; 4) Cultura como creadora de ciudadanía; 5) Diversidad cultural; 6) Educación y formación artísticas y apoyo a creadores; 7) Cultura con presupuesto digno; 8) Reestructuración de la Secretaría de Cultura.

 

En conferencia de prensa, el candidato también presentó a Raúl Padilla López, presidente de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, como su coordinador de enlace con la comunidad cultural.

 

Padilla López enfatizó en que todos los trabajadores del sector cultural en el gobierno deben contar con al menos la seguridad social con la que cuenta cualquier empleado.

 

“En algunas áreas es grave, agudo, como en el Fondo Nacional para la Cultura y las Artes, que cuando se creó la secretaría de Cultura, como iba a necesitar más personal administrativo, se les hizo fácil atraer personal de otras como el Fonca.

 

“Y ahora, el Fonca cubre sus necesidades con sistemas outsourcing, que no son los más adecuados y generan enorme inquietud e inseguridad en quienes actualmente laboran y en ese y otros espacios”, aseveró Padilla López.

 

En otros temas, Anaya reiteró su crítica a la forma como se ha implementado la reforma educativa, pues “se está gastando tres veces más en la evaluación, que lo que se está gastando en la formación y capacitación de los maestros”.

 

“Yo estoy convencido que solo que se mide se puede mejorar, pero se debe medir para mejorar, no para castigar, de tal manera que la inversión presupuesta debiera ser, por lo menos al revés, se tendría que estar invirtiendo mucho más en la formación y capacitación docente, que lo que se invierte en la evaluación. De ninguna manera estoy dando como planteamiento el dar marcha atrás a la reforma”, subrayó Anaya.

 

 

fahl