De a poco va permeando en los círculos políticos la posibilidad –ojo, posibilidad- de que la coalición Por México al Frente pudiera estar considerando sustituir a su candidato presidencial, Ricardo Anaya.

Hasta el momento no existe impedimento legal alguno para que el queretano pueda competir por la Presidencia del país, pese a la prontitud con que la PGR armó el expediente en su contra.

La autoridad no ha citado al candidato frentista a declarar; una cosa es que la SEIDO “lo haya invitado reiteradas veces’’ a rendir su declaración y otra que se le cite oficialmente por una investigación en su contra.

Pero el daño colateral que le sobrevino a Anaya es precisamente la siembra del rumor de que el escándalo sobre la presunta triangulación de recursos para favorecerlo, lo pueda descalificar de la elección.

Lo malo del tema es que Anaya no exhibió los reflejos de fajador para responder a los ataques de forma eficaz.

Su equipo de comunicación determinó que “las mentiras del PRI-gobierno caerían por su propio peso’’ y eso no ha ocurrido; por el contrario, el escándalo va escalando.

Anaya retó a la PGR a que lo cite o lo detenga si tiene pruebas en su contra; podría ser que eso nunca ocurra.

¿Recuerda el caso del ahora senador con licencia y líder de la CNOP, Arturo Zamora, que encabezaba todas las encuestas para ser gobernador de Jalisco y dos semanas antes de la elección fue acusado de tener vínculos con la delincuencia organizada?

Zamora perdió la elección, pero una semana después la PGR, entonces en manos de panistas, le dijo que “estaba limpio’’ y que no había expediente en su contra.

Conste que nomás es anécdota.

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Con todo y la caballada en su contra, Anaya sigue en el segundo lugar de las encuestas, de acuerdo a una compilación que hace los sondeos publicados la prestigiosa firma Bloomberg.

“Con la ayuda de la Procuraduría General de la República, el partido gobernante y su candidato José Antonio Meade no se guardan ningún golpe en su intento por cerrar la brecha frente a Ricardo Anaya, el candidato de la alianza encabezada por el Partido Acción Nacional, actualmente ubicado en el segundo lugar en las preferencias electorales’’, publica Bloomberg en su edición digital.

De acuerdo al seguimiento que ha dado a las encuestas publicadas, la empresa coloca a los candidatos con los siguientes porcentajes de intención de voto: López Obrador, 40.3%; Ricardo Anaya, 31.4% y Meade, 19.3%.

Bloomberg aclara que el compendio de encuestas registradas es hasta el 12 de febrero, por lo que habrá que esperar los resultados de las que se levantaron a partir de esa fecha y en la que seguramente ya se podrá medir el efecto del escándalo de Anaya.

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Nueve gubernaturas estarán en disputa el próximo julio, incluida la capital del país y sólo en una, Yucatán, el PRI comienza el proceso con los números a su favor.

En las elecciones concurrentes –Presidente y gobernador- resulta vital que el candidato a gobernador jale el mayor número de votos para el aspirante presidencial.

¿No se habrá equivocado el PRI en la designación de sus candidatos a gobernadores, por lo menos en algunos casos?

Veremos.

JNO