Este sábado se inauguró la 32 Feria de la piñata, en la explanada del municipio mexiquense, Acolman, donde las familias se reunieron para hacer vendimia de piñatas de diversas formas, colores y tamaños.

Como preámbulo del evento, se realizó una posada en el ex convento de San Agustín, para celebrar las misas de aguinaldo, mientras que en la plaza municipal se presentaron actividades culturales como danza folclórica y contemporánea; artes circenses, entre otras, por alumnos de las diversas escuelas del municipio.

Los artesanos mencionaron que ya tienen preparadas más de 200 piñatas que esperan vender y en los días precedentes de feria se encontrarán haciendo más. “Llevamos más de 15 años en esta feria, hacer piñatas es para nosotros un desestrés, además nos unen como familia, los colores del papel china causan felicidad, ya se siente el espíritu de navidad”, comentó María, una de las artesanas.

Las piñatas van desde tres por 100 pesos a las más caras y grandes de 200 pesos o más. Hay piñatas con forma de flor nochebuena, de burros y la tradicional estrella de siete picos; los colores que destacan son el amarillo, naranja, rojo, rosa mexicano, morado, tricolor, y combinaciones extravagantes para gustos especiales; van desde los cinco centímetros de diámetro hasta un metro aproximadamente, en las piñatas gigantes.

Además de piñatas, actividades culturales, se puede encontrar gastronomía típica, juegos mecánicos, música y bailes populares por la noche. La feria culminará el día 19 de noviembre.

 

PL