La Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México ya no debe ser considerada como un botín clientelar, ni como el trampolín para buscar la Presidencia de la República y menos como el centro de operación de la corrupción y de la impunidad, pues en los últimos 20 años, con gobiernos de la supuesta izquierda representada por el PRD, sólo han acrecentado los problemas sociales, aseguró José Luis Luege Tamargo.

 

En una entrevista con 24 HORAS, el ex panista, y hoy aspirante a jefe de Gobierno por la vía independiente, asevera que él sí sabe qué cambios radicales y de fondo requiere la CDMX, que no sean cosméticos y demagogos: “Conozco bien a la ciudad y desde hace 30 años la he venido estudiado en todas sus dimensiones; sé como cambiar a la capital del país con una visión de sustentabilidad al 2050”.

 

Quien fuera también titular de la Conagua (con Felipe Calderón) y secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales (al final del sexenio de Vicente Fox), sostiene que el PRD ha demostrado desde 1997 que no sabe gobernar, pues sólo perfeccionó el estilo clientelar del PRI y ha sido igual de corrupto: “Y de llegar Morena a gobernar nada cambiaría, será igual y representaría un retroceso”.

 

¿Cuál es tu visión de la CDMX?

Hace seis años, cuando fui aspirante por el PAN a la Jefatura de Gobierno, realicé un amplio diagnóstico de la ciudad y encontré cómo se estancaba con los gobiernos de izquierda. Hoy las condiciones están doblemente mal, es una urbe más insegura, completamente vulnerable a fenómenos naturales, como lo vimos con el sismo del 19 de septiembre, que revela la ausencia de planeación urbana, la cero coordinación metropolitana, así como la corrupción inmobiliaria bestial en todos los niveles.

 

Y hay algo muy grave de esta administración de Miguel Ángel Mancera, que es la violación de todas las normas de los planes parciales que había en las delegaciones; hoy la Seduvi puede autorizar la concentración de densidades en un solo predio, ya que le permiten al desarrollador presentar 20 predios y decir “todo lo voy a concentrar en uno”. Eso viola normas de densidad, altura y de capacidad estructural, pero, además, todos estos complejos de Mancera no van a la par de un desarrollo urbano, ni de movilidad ni de vialidades y menos de agua y drenaje.

 

¿Por dónde debe venir el cambio?

Yo parto, primero, de una plataforma que implica un diagnóstico técnico, objetivo, de calidad y de fondo que plantea soluciones de largo plazo. Y, lo segundo, es una visión metropolitana. La CDMX ya no puede verse aisladamente envuelta en políticas clientelares y corruptas, pues esto agrava nuestros problemas debido a una visión corta, sin políticas públicas que pongan orden en las zonas metropolitanas, como las tenemos con el Edomex –donde también impera la corrupción y la inseguridad a gran escala–.

 

¿Por ahí enfocas tu proyecto de cambio?

Lo he centrado en cinco grandes ejes: Una ciudad segura, con trabajo, sustentable, inteligente e incluyente.

 

El tema que le preocupa a la gente es la inseguridad, se han disparado como nunca los robos, asaltos con violencia extrema, extorsiones, el cobro de derecho de piso, ejecuciones y feminicidios, entre otros.

 

Planteamos limpiar todos los ministerios públicos, desde el bunker de la PGJDF con la incorporación de personal joven y bien calificado, pero también evaluando a las personas con experiencia, trayectoria y que aprueben los niveles de confianza.

 

Propongo una reforma total y control de todos los reclusorios. Impulsaré el uso de tecnología de punta para eliminar el uso de celulares en los penales; es algo increíble de creer que las autoridades capitalinas no puedan controlar esta situación.

 

Busco elevar la capacitación de la Policía: certificada, con mejores salarios y prestaciones. Y propongo evaluar sistemáticamente a todos los mandos con el fin de erradicar la corrupción interna.

 

¿Y con el trabajo?

En el tema del trabajo, impulso una dignificación de los mercados públicos, pues son cercanos a la cultura de la capital. Con el ambulantaje y los tianguistas se promoverá llevarlos a la formalidad a través de crear centros de trabajo y nuevos mercados públicos. Y algo importante es que se transparentarían todos los derechos de pago que entrarían al Gobierno de la CDMX; y para que haya formalidad tiene que haber incentivos, tiene que reducirse la tramitología para abrir comercios.

 

¿Cómo sería tu plan de sustentabilidad?

Llevo 30 años analizando los temas del agua, de los bosques y áreas verdes. Y es lamentable la situación en que está la ciudad en el ámbito ambiental. Mancera miente cuando habla de que la CDMX es una urbe sustentable, tal y como también lo hizo Marcelo Ebrard. El más cínico y demagogo fue Ebrard, quien pagó a instituciones extranjeras para recibir un reconocimiento de que el entonces DF era sustentable, y esto es totalmente falso. El señor sólo veía sus aspiraciones políticas, como ahora las ve para regresar a formar parte del equipo de Andrés Manuel López.

 

La ciudad es completamente vulnerable, y el problema número uno es el abasto y calidad del agua. Los gobiernos del PRD dejaron de lado el tema del agua.

 

Entonces vamos a hacer un camino realmente de sustentabilidad basado en estudios muy técnicos y de fondo, en donde vamos con el agua, bosques y parques, calidad del aire y energías renovables, así como transformar la movilidad. Pero todo está vinculado al desarrollo. Si no tenemos una planeación de desarrollo y reordenamiento urbano metropolitano vamos derecho al colapso. En este sentido haremos toda una planeación con visión 2020-2050.

 

¿Planteas más normas para regular el desarrollo?

La normatividad en cuanto a construcciones está bien, lo que no está bien es el ordenamiento; es decir, yo parto de un documento que manejé cuando fui titular de la Semarnat, que se llama Ordenamiento Ecológico Territorial para todo el país, y yo obligaría la visión metropolitana en función de ese ordenamiento ecológico. Hay cosas que no se van a resolver en seis años, por eso planteó la recuperación de parques nacionales, bosques, zonas de recarga del acuífero, de áreas agrícolas y tecnificarlas al 100% en Milpa Alta, Tláhuac y Xochimilco.

 

Y desde luego, no voy a permitir un solo desarrollo sin áreas verdes. Por ejemplo, en Cuatro Caminos, donde existía un Toreo, se debió haber contemplado una superficie para áreas verdes y no se hizo nada. Santa Fe y la Nueva Granada tienen desarrollos sin parques.

 

¿Estás a favor de la planta de termovalorización de basura?

Estoy de acuerdo en generar energía eléctrica con base al valor calórico de los desechos inorgánicos, pero en el tema de la basura hay que partir del ordenamiento del servicio, ya que la mayoría de los camiones son una chatarra y hay mucha que opera en ellos sin estar contratada y hacen la pepena en plena calle, exponiendo su salud. Eso se tiene que regular en todas sus dimensiones. Además, propongo centros de acopio y reciclamiento.

 

Sin embargo, la forma en que actuó Mancera, de firmar un proyecto de 10 mil millones de pesos, y que además va a obligar a la ciudad a un pago anual de más de dos mil 500 millones de pesos para la planta de termovalorización, eso no puede ser; cómo es posible que lo haga al final del mandato, pues ya dijo que se va el 15 de diciembre, esto genera sospechas. Recordemos que lo mismo hizo Ebrard, que también aprobó un proyecto al cierre de su mandato, con empresas que iban a cerrar el Bordo Poniente y proyectaban capturar el metano para generar energía eléctrica, y de eso no se ha hecho nada.

 

¿Y el NAICM?

Con el Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México (NAICM), sin ser tema de la ciudad, voy a exigir que haya la garantía de las obras de mitigación a las que está obligada la construcción en temas ambientales. Y voy a exigir la remediación del suelo por parte del proyecto federal del actual aeropuerto, de 770 hectáreas, y que sea destinado a recuperación ambiental. También voy a exigir un plan rector del ordenamiento regional con el NAICM, y que se impida un crecimiento urbano anárquico, como ocurrió en Ecatepec y Nezahualcóyotl.

 

¿Y cómo será la CDMX inteligente e incluyente?

En este rubro trabajaré al máximo con el desarrollo tecnológico y con el impulso al capital intelectual, a la educación con valores y tecnología, y a la inversión para que los jóvenes tengan un máximo de oportunidad.

 

La ciudad incluyente será donde habrá una verdadera democracia participativa, para que haya igualdad de oportunidades para los jóvenes.

 

¿Te ves fuerte para competir?

Por supuesto, yo veo en el PRD y Morena que son exactamente más de los mismo; se mueven con clientelas y dinero, y yo voy a mover a los jóvenes y las redes de ciudadanos independientes; mi teoría es que somos más los ciudadanos independientes, pero no participan igual. En el caso del PRI, la llegada de Eruviel Ávila obedece a una estrategia de fortalecer su estructura y será un contrincante fuerte. Sobre el PAN, anda enredado con el Frente y no se ve claridad, el panismo perdió fuerza.

 

 

¿Qué te dicen estos nombres?

José Narro: Sin ninguna capacidad para dirigir la CDMX.

 

Aurelio Nuño: Inexperto para gobernar.

 

Ricardo Monreal: Ya se doblegó a los intereses de Andrés Manuel.

 

Alejandra Barrales: Más de lo mismo, corrupción y sin capacidad ni visión de gobernante.

 

Claudia Sheinbaum: Lo mismo del PRD. Ella gobernó con AMLO y es responsable de clientelismo, corrupción y la demagogia que impera en los gobiernos de izquierda, pero ella se cambió a Morena por conveniencia; no hay cambio, es lo mismo.

 

¿Cómo va tu proceso de recabación de firmas?

Para ser candidato sin partido a la CDMX se requieren muchas otras condiciones, pero la más importante es tener el apoyo de 1% de ciudadanos en el listado nominal, que equivale a 74 mil 500 rubricas.

 

El plazo para recabar firmas vence el 12 febrero y es probable que se amplíe al 19 del mismo mes. Somos hasta ahora 14 independientes. Ahora llevo más de cuatro mil firmas y la campaña inicia en marzo y terminará en mayo. La elección será el 8 de junio.

 

 

 

*edición impresa 24 Horas

 

caem