Con 90 votos a favor, 29 en contra y sin abstenciones, el pleno del Senado de la República aprobó en lo general y en lo particular la Ley de Ingresos 2018, que le dará al Gobierno federal un total de cinco billones 270 mil 667 millones de pesos.

 

Esta cifra significa 43 mil 291.4 millones de pesos más que el proyecto original presentado por el Ejecutivo federal, luego de que el Senado avaló los ajustes que la Cámara de Diputados hizo al precio del petróleo y el tipo de cambio.

 

El senador José Yunes Zorrilla, presidente de la Comisión de Hacienda explicó al presentar el dictamen ante el pleno que los diputados cambiaron la expectativa del precio del petróleo de 46 a 48.5 dólares por barril y el tipo de cambio de 18.10 a 18.40 pesos por dólar.

 

Con ello, se logra un presupuesto responsable con el país, consistente con el objetivo de bajar la deuda y favorable para el crecimiento económico y el desarrollo social.

 

La Federación tendrá una deuda interna de 470 mil millones de pesos y externa de cinco mil 500 millones de dólares.

 

Para la Ciudad de México el endeudamiento aprobado pasa de cuatro mil 500 millones a cinco mil 500 millones de pesos, para atender la emergencia provocada por el sismo del 19 de septiembre.

 

Aunque reconoció que hubo discusiones intensas en comisiones sobre esta ley, reconoció a todos los grupos parlamentarios el esfuerzo y la responsabilidad para sacar adelante el dictamen, a pesar de las complejidades en el Senado, por lo que los convocó a votar a favor.

 

Durante esta segunda sesión del día, que comenzó poco después de las 17:30 horas, el senador Benjamín Robles Montoya, del Partido del Trabajo (PT), presentó un voto particular, al adelantar que votaría en contra y explicó sus razones.

 

Explicó, entre otras cosas, sus dudas respecto a la posibilidad de que se alcancen los precios del barril de petróleo y de tipo de cambio, que servirá para obtener los 43 mil millones de pesos que se destinarán a la reconstrucción derivada de los sismos de septiembre.

 

También alertó sobre el crecimiento de la deuda pública que implica esta Ley y la falta de certeza, dijo, sobre quiénes serán los verdaderos beneficiarios de los recursos establecidos en la legislación.

 

Para la discusión en lo general, se apuntaron varios senadores, entre ellos Gerardo Sánchez García del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Gerardo Flores Ramíez, del Verde Ecologista de México, e Isidro Pedraza, quienes argumentaron a favor del dictamen afirmando que se trata de un documento que garantiza el crecimiento responsable.

 

Pero en contra, argumentaron entre otros Manuel Bartlett, Juan Carlos Romero Hicks, Mario Delgado, Dolores Padierna, Fidel Demédicis y Armando Ríos Piter, quienes coincidieron en manifestar sus dudas sobre la seriedad con la que se calculó el precio del petróleo y del dólar.

 

Luego de esos posicionamientos, se pasó a la discusión en lo particular, donde se reservaron sobre todo artículos referentes al Impuesto Sobre la Renta, el precio de las gasolinas y los recursos para la reconstrucción.

 

Cada uno de los 10 senadores que presentaron reservas a diversos artículos o la creación de artículos transitorios, argumentó su propuesta para luego pasar a la votación en cada caso.

 

Algunos de ellos pidieron que esta votación se hiciera a través del tablero electrónico; otros aceptaron la votación económica. Ninguno obtuvo el resultado deseado y los artículos discutidos en lo particular, en particular el primero y el segundo, quedaron tal como venían en la propuesta.

 

JMSJ