El gobernador Graco Ramírez y el presidente Enrique Peña Nieto evaluaron los daños que dejó en Morelos el sismo de 7.1 grados, registrado el pasado día 19; y las acciones emprendidas por los gobiernos Federal y Estatal para atender y garantizar la protección y bienestar de las familias damnificadas.

 

Asimismo, acordaron avanzar en el Censo de Evaluación de Daños para iniciar la etapa de reconstrucción de viviendas y escuelas; la reparación y conservación del Patrimonio Cultural de México dañado; y reactivar la economía con apoyos económicos y créditos blandos y una campaña publicitaria a favor de las comunidades con vocación turística.

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En su segunda visita a Morelos en una semana, el presidente Enrique Peña Nieto resaltó la estrecha colaboración que de inmediato se estableció con el gobierno de Morelos para enfrentar la emergencia, en el rescate y atención de víctimas y establecimiento de acciones de protección, atención médica albergue y alimentación de quienes resultaron damnificados.

 

Reconoció las participación de miles de personas, principalmente jóvenes, en estas tareas y en el armado y distribución de los apoyos para que estos estén llegando a la población afectada por los sismos. “Es la comunidad la que debe de cerciorarse, vigilar y cuidar que los apoyos vayan realmente a las personas que fueron afectadas”, puntualizó.

 

En tanto, el gobernador Graco Ramírez convocó a la sociedad a continuar trabajando junto con los gobiernos Federal, Estatal y municipales por las familias que fueron afectadas por el sismo y agradeció el respaldo a Morelos de presidente Peña Nieto, quien por segunda ocasión visitó el estado para atender la problemática relacionada con el fenómeno natural.

 

El presidente Enrique Peña Nieto informó que Morelos avanza en el levantamiento del Censo de Evaluación de Daños en viviendas, para establecer el tipo de afectación e iniciar la reconstrucción.

 

Explicó que habrá apoyo económico y de materiales para iniciar la rehabilitación de viviendas y el levantamiento de las casas que sufrieron daño total; y pidió la participación de los afectados en estas tareas.

 

Agregó que se está cuantificando el daño en los planteles educativos, a través del Gobierno del Estado y la Secretaría de Educación Pública (SEP) federal; y confirmó qua ya se cuenta con los recursos para iniciar las reparaciones y la reconstrucción de las que hayan sufrido daño total. Indicó no se va permitir el regreso a clases en las escuelas que no sean seguras.

 

Asimismo, informó que la Secretaría de Cultura y el Instituto Nacional de Antropología e Historia han evaluados los daños al patrimonio cultural e histórico; y el objetivo principal es su reparación y preservación por lo que no habrá demoliciones.

 

“Puedo informar que el templo de San Juan Bautista se va a reparar, no se va demoler, porque forma parte de la riqueza cultural y turística” de Tlayacapan, apuntó.

 

Anunció la reactivación de la economía, mediante apoyos específicos a los comerciantes y prestadores de servicios que tuvieron afectaciones en sus negocios para que recuperen sus inventarios y mercancías. Precisó que habrá apoyo económico y créditos blandos, así como una campaña publicitaria en radio y televisión para promover el turismo.

 

“Vamos a lanzar las campañas de promoción turística porque es una forma de ayudar a las comunidades que sufrieron afectaciones y el turismo es una parte central de su economía”. Agregó que la mejor manera de ayudar lugares, como Tlayacapan, es visitándolos, que pese a las afectaciones están en posibilidad de recibir a los visitantes.

 

El presidente pidió a la población tiempo y acompañamientos porque las acciones de reparación y reconstrucción de viviendas, escuelas y del patrimonio histórico va a durar semanas.

 

El mandatario reiteró su solidaridad con las familias afectadas por el sismo y sus condolencias a las que perdieron a uno de sus miembros.

 

Acompañaron en su gira de trabajo al gobernador Graco Ramírez y al presidente Enrique Peña Nieto, el alcalde de Tlayacapan, Dionisio de la Rosa Santamaría, y lo secretarios de la Defensa Nacional, general Salvador Cienfuegos Cepeda, y de la Marina Armada de México, Almirante Vidal Francisco Soberón Sanz.
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