El pasado 19 de septiembre luego del sismo de 7.1 que sacudió a la Ciudad de México, Martín Méndez quedó enterrado entre los escombros de un edificio ubicado en la calle Álvaro Obregón de la colonia Roma.

 

Matín, cerrajero de profesión, se tomó una selfie al verse entre los escombros y de ésta manera evidenciar la situación que estaba viviendo.

 

Durante una entrevista contó que tenía que salir con vida del lugar por su hija y aunque estaba atrapado entre los escombros de concreto y sin poder moverse, él le pidió ayuda a Dios, mientras oraba por su hija de 3 años a quien deseaba ver y por ello se convenció de que saldría con vida de ese lugar.

 

De acuerdo con los rescatistas Méndez estuvo 17 horas atrapado, pues cuando ocurrió el sismo estaba arreglando un archivero cuando todos comenzaron a correr.

 

“Todos corrieron a las escaleras de emergencia y todos querían bajar al mismo tiempo, a mi me aventaron y me rompen mi rodilla.” afirmó.

 

Entre las personas atrapadas se encontraba, Diana Pacheco, quien envió un mensaje de WhatsApp a su esposo, en el que le avisó que estaban cerca de las escaleras de emergencia y que, aunque llegó con 16 horas de retraso, fue clave para su rescate.

 

 

 

aarl