El 2 de noviembre de 2012, una bala perdida penetró a través del techo de un cine en Iztapalapa, terminando con la vida de un niño de 10 años. Este hecho motivó uno de los programas más emblemáticos de la presente administración: Por tu familia, desarme voluntario, iniciativa que en próximas semanas colocará su primera escultura hecha con el arsenal entregado por habitantes capitalinos.
Pedro Arellano, quien coordina el programa desde su inicio en la Secretaría de Desarrollo Social (Sedeso) capitalina, señaló que esta iniciativa se encuentra dando un nuevo paso para su consolidación. Y es que, recientemente, el programa fue convertido en ley por la Asamblea Legislativa del DF (ALDF) lo que garantiza su operación en las próximas administraciones.
Otra de las novedades que pretende generar conciencia entre la población, principalmente entre niños y jóvenes, es la próxima instalación de la primera escultura hecha con alrededor de tres toneladas de las armas recolectadas. Se trata de Alas de Paz, obra similar a otras alas ubicadas sobre Paseo de la Reforma, con la diferencia de que ésta permite distinguir los cartuchos y los cañones del armamento con que se creó.
Aunque aún no hay fecha precisa para su instalación, el Gobierno capitalino ya comenzó la gestión para que sea colocada y visitada en el Centro Histórico, probablemente en La Alameda, señaló Arellano en una entrevista con 24 HORAS.
Detalló que el programa actualmente se encuentra en su séptima etapa, es decir, que ya ha pasado siete veces por todas las delegaciones para cambiar las armas por dinero.
“Recientemente fuimos a Benito Juárez y sigue la delegación Gustavo A. Madero; en las delegaciones más pequeñas estamos 15 días y en las más grandes de tres cuatro semanas”, dijo.
Detalló que para la Sedeso, el programa tiene dos vertientes que benefician a la ciudadanía: una es la cuantitativa, que se traduce en el intercambio de armas por dinero; y otra es la cualitativa, la cual permite que la entrega del arma disuada alguna conducta violenta, que incluso puede surgir en el hogar, al interior de una familia.
En los más de cuatro años de operación, el programa ha sufrido algunos cambios. Por ejemplo, en un inicio se entregaban aparatos electrodomésticos a cambio de las armas; pero con el tiempo, los capitalinos prefirieron recibir dinero.
Otra de las recientes modificaciones consiste en llevar el programa directamente a los domicilios a través del sistema de atención telefónica LOCATEL, esto para atender a la población de la tercera edad que tiene armas o a aquellas personas que tienen miedo de transportar ese tipo de dispositivos.
Cifras
28 mil armas recolectadas desde que inició el programa de desarme voluntario en 2012
38.92% de capitalinos encuestados por Sedeso opina que un arma en el hogar es insegura