Jorge Gaviño, titular del Sistema de Transporte Colectivo Metro, pidió a la Federación tener “lógica presupuestal” para dotar de recursos al STC con vistas a la operación del Tren Interurbano México-Toluca, pues de lo contrario, se hará un cuello de botella en la conexión de este nuevo transporte con la terminal de Observatorio.

 

Tras la presentación de un sistema de aparatos para combatir los males cardiacos al interior del Metro, el funcionario señaló que un inicio, el proyecto del tren contemplaba la ampliación de la Línea 9, la renovación de la estación Observatorio y la ampliación de la Línea 12; sin embargo, en los 17 mil millones de pesos que contempla el Gobierno Federal para el tren, no hay una asignación para dichos trabajos.

 

“Nosotros esperamos que se sensibilicen los encargados del manejo presupuestal pero particularmente los que manejan los proyectos. El tren México Toluca, que es lo que hemos señalado en múltiples ocasiones, tiene asignado un presupuesto de 17 mil millones de pesos que contemplado con lo que tiene el sistema es enorme la diferencia”, dijo.

 

El funcionario explicó que, por ejemplo, en la terminal del Metro Observatorio se reciben diariamente 70 mil personas. Con la proyección del tren se agregarían 250 mil pasajeros más. De no hacerse la renovación de la estación, se impediría el desfogue de las personas que llegan de Santa fe y Toluca a otras partes de la ciudad.

 

“El llamado que hacemos nosotros, muy respetuoso a las autoridades federales que por una parte gestionan el presupuesto y por otra gestionan la obra pública, que reflexionen y que nos aporten los recursos necesarios”, dijo.

 

Opinó que, de no haber más dinero, se debería disminuir recursos del tren, regresarlo a la Federación y posteriormente reorientarlo a las líneas del Metro.

 

Detalló que tan sólo para la ampliación de la Línea 9 se requieren entre 40 y 50 millones sólo del proyecto ejecutivo, así como tres trenes de 350 millones cada uno. En cuanto a la ampliación de la Línea 12, mencionó que ésta forma parte de un plan anual que está a cargo de la Secretaría de Obras.

 

Este año, el Metro tuvo de fondos federales alrededor de 300 millones de pesos que fueron para reparación de escaleras y elevadores.
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