Luego de guardar un minuto de silencio en memoria de las víctimas del atentado perpetrado en contra de elementos del Ejército mexicano, el pasado 30 de septiembre en el municipio de Culiacán, Sinaloa, el Senado de la República, hizo una enérgica condena y exigió que se lleven a cabo todas las acciones correspondientes para castigar a los responsables con todo el rigor de la ley.

 

El presidente de la Mesa Directiva, Pablo Escudero Morales, enfatizó que frente al crimen y la violencia la respuesta de las instituciones que conforma el Estado debe ser unánime y contundente.

 

“Como mexicanos y representantes de la nación nos sentimos profundamente indignados y lastimados por estos actos de barbarie irracional, que representan una afrenta contra el Estado mexicano y contra sus instituciones”.

 

En el marco de la sesión ordinaria de este miércoles, el presidente de la Mesa Directiva, envió a nombre del Senado, sus “más sentidas condolencias a los familiares y amigos de los soldados caídos en el cumplimiento de su deber, y deseamos una pronta recuperación al personal militar y civil que resultaron heridos en estos lamentables acontecimientos”.

 

Al mismo tiempo, expresaron su reconocimiento a los cuerpos castrenses de México, “héroes anónimos que todos los días, con valor, disciplina y lealtad, prestan sus servicios a la sociedad mexicana de manera incondicional e inquebrantable” y se unieron al homenaje nacional para quienes enterregaron su vida en el cumplimiento de su deber.