Personal de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) visitó puntos fronterizos de Tapachula, Chiapas, y Tijuana, Baja California, para supervisar el respeto a los derechos humanos de migrantes de Haití y de varios países de África.

 

El organismo recordó que en las últimas fechas se registró un incremento sustancial de esta población migrante, que tiene el propósito final de entrar a Estados Unidos.

 

De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Migración (INM), en el transcurso del año se ha acumulado una cifra de 13 mil personas de África y Haití; tan solo en agosto y septiembre llegaron casi cuatro mil personas, entre adultos y menores de edad.

 

El organismo autónomo señaló que la situación ha provocado una gran actividad del INM, ya que cada día concede al menos 300 oficios de salida que otorgan un permiso de 20 días naturales para poder trasladarse vía aérea o terrestre hasta Tijuana, sin necesidad de alojarse en la estación migratoria.

 

De ahí, esas personas pueden hacer trámites migratorios para ingresar a Estados Unidos con una solicitud de asilo, indicó en un comunicado.

 

La Comisión Nacional de los Derechos Humanos destacó que la autoridad migratoria carece de información o elementos objetivos para saber cuántas personas más arribarán en un futuro al país desde África y Haití.

 

“De ser así, se estaría ante circunstancias que podrían considerarse de cuidado, en virtud de la concentración poblacional actual de migrantes”, expuso.

 

Esta situación propicia que las autoridades de los tres niveles de gobierno, la sociedad civil organizada y los albergues tengan que hacer esfuerzos extraordinarios para mitigar las circunstancias adversas, al incrementarse el núcleo de personas migrantes en espera.

 

Por ello estará atenta al desarrollo de la situación que presenten los flujos migratorios, seguirá de manera muy puntual las medidas cautelares y, en el ejercicio de sus facultades, emprenderá las acciones correspondientes para garantizar el respeto a sus derechos humanos.