Aún no se enfrentan directamente –y quizás nunca lo hagan frente a frente–, pero Ricardo Anaya no cesa en buscar una confrontación con Andrés Manuel López Obrador.

 

El dirigente panista quiere debatir con el líder de Morena.

 

Al igual que lo intentó Aurelio Nuño hace unos meses, Anaya lanza buscapiés cuantas veces puede porque sabe que un tú a tú con el tabasqueño le daría puntos y popularidad.

 

Ayer fue un día de ésos.

 

Comenzó en la ciudad de Querétaro –gobernada por el panista Francisco Domínguez–, cuando en una conferencia de prensa le preguntaron a la secretaria general de Morena, Yeidckol Polevnsky, si López Obrador aceptaría el reto de debatir con Anaya.

 

La respuesta de Polevnsky fue rotunda: “¡No hay posibilidad alguna!”, declaró.

 

Y aquí va la razón que expuso para tal rechazo:

 

-Hay niveles, compañeros, hay niveles… Andrés Manuel es una gente muy probada, Andrés Manuel es una gente que tiene mucho que decir.

 

“¿Qué sucede realmente? –apuntó la ex senadora– Pues que cada que alguien quiere que ustedes (los reporteros) lo tomen en cuenta, se pelea con Andrés Manuel y dice cosas contra él para que Andrés Manuel los suba al ring y les dé notoriedad”.

 

-¿Entonces no va a debatir con Anaya?

 

-Sería un abuso. Un peso completo no agarra a un peso mosca o un peso pluma…

 

“Si Andrés Manuel –recordó–, en un debate con el famosísimo Jefe Diego (Fernández de Cevallos), le ha dado soberana paliza, ¡imagínate a lo que se arriesgan los demás! Lo que pasa es que como saben que no los voltean ni a ver, lo andan diciendo para darse notoriedad. Pero no, Andrés Manuel juega en otras ligas”.

 

Es un autoritario.- La respuesta de Ricardo Anaya a lo dicho por Polevnsky no tardó en venir. Vía un comunicado, el líder del blanquiazul lamentó el rechazo de López Obrador al debate y expuso:

 

“En todas las democracias los líderes partidistas debaten y de esa manera los ciudadanos pueden comparar las ideas y visiones de cada uno. López Obrador, en cambio, sueña con un México en el que nadie lo contradiga, demostrando así un talante profundamente autoritario”.

 

Dicho lo anterior, el queretano agregó: “Es un cobarde. Y además de cobarde es un soberbio”.

 

De ahí partió Anaya para anunciar que en próximos días los diputados federales del PAN presentarán una iniciativa de reforma para que haya más debates y menos spots. Esto se haría mediante la utilización de los tiempos oficiales de los partidos políticos en forma de debates entre sus dirigentes.

 

“Los partidos políticos tenemos el mandato constitucional de fortalecer la cultura democrática. Y sin debates e intercambios de ideas, eso simplemente no es posible”, alegó.

 

Barbosa y Ochoa Reza también se confrontan.- El coordinador de los senadores del PRD y el jefe nacional del PRI también tuvieron sus dimes y diretes. ¿La razón? El aumento en las tarifas de energía eléctrica.

 

Miguel Barbosa llamó “Pinocho” a Enrique Ochoa por sus “mentiras perversas” de que no habría aumentos a la luz en 2016; en tanto que el priista le pidió “elevar el nivel de debate”, además de señalarle que “falta a la verdad”.

 

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