El presidente del Senado de la República, Roberto Gil Zuarth, consideró que la detención de los dirigentes de la Sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) debe estar sustentada en un expediente judicial bien integrado, en el que el ministerio público haya recabado las pruebas suficientes para llegar a la convicción de que se cometieron delitos y en consecuencia se ha actuado.

 

Consideró que “si se ve como una causa de justica penal, como una forma de restablecer las condiciones de legalidad y que una persona que ha violado la ley pague sus responsabilidades ante la justicia, me parece que es lo correcto”.

 

Destacó que independientemente del caso concreto, el Senado ha hecho un llamado reiterado y sistemático que se aplique la ley porque “la Reforma Constitucional no está en juego”, aclaró.

 

“La Reforma Constitucional en materia Educativa no está sujeta a la decisión y al arbitrio de una expresión disidente del magisterio educativo”.

 

Enfatizó que bajo ninguna lógica, la Reforma Educativa debe estar subordinada a las intenciones del sindicalismo magisterial y que en consecuencia se tiene que aplicar la ley.

 

“Y ahí donde se violen los derechos de terceros, el derecho de circulación, el derecho a la libre expresión de las ideas, el derecho a tener un comercio, el derecho a poder acudir a una escuela o a un centro de recreación, en cualquier caso se aplica la ley”.

 

Consideró que la disidencia magisterial no tiene ningún derecho y ninguna legitimidad para invadir y afectar la vida cotidiana de las personas en la Ciudad de México, en Chiapas, en Oaxaca o en cualquier lugar del país.  dmh