SAN FRANCISCO. Aunque todavía es un misterio lo que le depara el futuro, el mariscal de campo de los 49ers de San Francisco, Colin Kaepernick, se presentó en los entrenamientos del equipo, de cara al inicio de la temporada 2016-17 de la NFL.

 

Kaepernick podría emigrar con los actuales monarcas, los Broncos de Denver, ya que existe interés por sus servicios; sin embargo, las negociaciones se encuentran estancadas “debido a que no hay un arreglo sobre quién pagará el salario garantizado del quarterback de 11.9 millones de dólares para la próxima temporada”, informó ESPN.

 

Trascendió que John Elway, presidente de los Broncos, se reunió con el jugador el pasado jueves, aunque no habrían acordado nada. En dicha junta quedó claro que Denver quiere que Kaepernick sea su QB titular para intentar repetir el título, pero que no quiere pagarle más de siete millones de dólares al año.

 

El jugador, por su parte, fue el primero que quiso salir de San Francisco y pidió el traspaso, con la condición de que le mantengan el sueldo que actualmente tiene con los 49ers.

 

“En el caso de que acabe en Denver, y en el caso de que renuncie a parte de ese dinero este mismo año, será porque ha conseguido que se le pague, de forma asegurada, la campaña que viene, u otro tipo de prestaciones”, dio a conocer el diario AS.

 

Por lo pronto, Kaepernick tendría un bono extra con San Francisco que asciende a los 400 mil dólares en caso de que asista a 90% del programa de entrenamiento, mismo que es voluntario.