Este miércoles es la última jornada del papa Francisco en nuestro país, la cual tendrá como escenario a Ciudad Juárez, una urbe que desde hace dos décadas está marcada por los feminicidios, la violencia del narcotráfico y la migración, temas que serán tocados en los discursos del Pontífice.

 

La violencia contra las mujeres de Juárez comenzó a tomar relevancia en la opinión pública en 1993, cuando desaparecieron las niñas Alma Chavira Farel y Gladys Janeth Fierro; esta última apareció muerta y con signos de violación.

 

Desde entonces ha habido miles de denuncias por la desaparición, violación y muerte de mujeres en Ciudad Juárez. De acuerdo a un estudio del Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS), entre 2008 y 2013 hubo mil 24 feminicidios en el municipio.

Infografía. Xavier Rodríguez

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Los casos más relevantes fueron los de Claudia Ivette González, Esmeralda Herrera Monreal y Laura Berenice Ramos Monárrez, cuyos cuerpos aparecieron en los campos algodoneros del municipio. Por esto, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos emitió una sentencia contra el Estado mexicano.

 

Pero la violencia no se queda entre las mujeres, sino que permeó en toda la sociedad. Desde que comenzó la “Guerra contra el narco”, Ciudad Juárez ha sido una de las localidades más golpeadas.

 

Entre 2008 y 2010 fue considerada la ciudad más violenta del mundo por el Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y Justicia Penal, que cada año hace una lista mundial sobre el tema.

 

En esos años, la tasa de homicidios alcanzó los 200 por cada 100 mil habitantes. Por el trabajo de la sociedad civil y las autoridades, la tasa bajó a 27.17 en 2015.

 

Esa violencia se reflejó en la cárcel de la ciudad, la cual durante los años de mayor violencia también se consideró como la más peligrosa del mundo por tener entre su población a varios sicarios del narcotráfico.

 

Ahora, el papa Francisco tendrá la oportunidad de ver personalmente cómo viven los reclusos, pues tiene programada una misa en el lugar a las 10:30 de la mañana.

 

Pero la violencia no es el único problema en Juárez, también está la migración. Según cálculos de la presidencia municipal, cada año llegan 20 mil personas con la intención de cruzar hacia Estados Unidos, además de que reciben a 10 mil mexicanos deportados.

 

Frontera

 

El obispo de Roma celebrará la primera misa binacional, pues oficiará en las instalaciones de la Feria de Juárez, a unos metros de la frontera con Estados Unidos, país donde ya se prepararon gradas para que miles de personas escuchen a Francisco hablar sobre violencia y migración.