La mayoría de los integrantes de la Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) anticipa que la inflación general se mantendrá por debajo de 3.0% el resto del año y para 2016 estima que se ubicará en niveles cercanos a ese porcentaje.

 

Así lo refiere la minuta de la reunión de la Junta de Gobierno del Banxico referente a la decisión de política monetaria anunciada el 29 de octubre pasado, en la cual se decidió por unanimidad mantener en 3% el objetivo para la tasa de interés Interbancaria a un día.

 

Según el documento difundido este jueves, esta decisión se tomó en virtud de que la Junta de Gobierno del banco central estimó que la postura monetaria vigente es conducente a afianzar la convergencia de la inflación a la meta permanente de 3%.

 

Señala que la mayoría de los miembros de la Junta de Gobierno estimó que el balance de riesgos para la inflación se mantiene sin cambio respecto de la reunión anterior de política monetaria, si bien algunos miembros indicaron que el balance continúa siendo al alza.

 

Entre los riesgos al alza para la inflación, la mayoría consideró la posibilidad de que ante un nuevo deterioro de las condiciones en los mercados financieros internacionales, el peso retome una tendencia hacia la depreciación que se podría manifestar en la dinámica de formación de precios y de sus expectativas.

 

En cuanto a los riesgos a la baja, la mayoría resaltó la posibilidad de que la actividad económica en el país tenga un dinamismo menor al previsto, que la cotización de la moneda nacional revierta parte de la depreciación que acumuló en los meses previos y que continúen registrándose reducciones en los precios de los servicios de telecomunicaciones y algunos energéticos.

 

La minuta expone que la mayoría de los miembros mencionó que la postura de política monetaria ha sido congruente con la convergencia de la inflación a la meta permanente de 3%.

 

Asimismo, la mayoría destacó que la inflación ha mantenido su tendencia a la baja alcanzando niveles mínimos históricos y que hasta ahora, el cambio en precios relativos derivado de la depreciación del tipo de cambio real se está dando de manera ordenada y gradual.

 

En cuanto a la evolución de la economía mexicana, la mayoría de los integrantes de la Junta de Gobierno del Banxico señaló que ha continuado presentando un crecimiento moderado y considera que el balance de riesgos para el crecimiento se deterioró respecto a la decisión previa.

 

Algunos integrantes señalaron que es de esperarse que el ritmo de crecimiento de la actividad económica aumente de manera gradual en los próximos meses, estimulado tanto por la demanda interna como por la externa.

 

Además, coincidió en que prevalecen condiciones de holgura en la economía en su conjunto y en el mercado laboral, por lo que no se anticipan presiones generalizadas sobre los precios provenientes de la demanda agregada, ni de los mercados de insumos.

 

Ante la posibilidad de que la complejidad del entorno externo se mantenga durante un periodo prolongado, la mayoría coincidió en que es fundamental mantener un marco macroeconómico sólido en nuestro país.

 

Para ello, apuntaron, será necesario concretar los esfuerzos recientemente planteados en el ámbito fiscal, ajustar la postura de política monetaria de ser necesario e implementar adecuada y oportunamente las reformas estructurales.

 

En suma, la Junta de Gobierno del Banxico considera que las condiciones de la economía siguen mostrando debilidad, la inflación general ha continuado descendiendo y se espera que se mantenga por debajo del objetivo durante 2015.

 

Además, resaltó, la inflación subyacente ha permanecido por debajo de 3.0% y las expectativas de inflación están bien ancladas, a pesar de la depreciación de la moneda nacional.

 

Sin embargo, precisa, las posibles acciones de política monetaria de la Reserva Federal podrían tener repercusiones sobre el tipo de cambio, las expectativas de inflación y, por ello, sobre la dinámica de los precios en México.

 

Por tanto, la Junta de Gobierno se mantendrá atenta a la evolución de todos los determinantes de la inflación y sus expectativas para horizontes de mediano y largo plazo.

 

En particular a la postura monetaria relativa entre México y Estados Unidos, al traspaso de movimientos del tipo de cambio a los precios del consumidor, así como a la evolución del grado de holgura en la economía, agrega la minuta.

 

Esto, a fin de estar en posibilidad de tomar las medidas necesarias con toda flexibilidad y en el momento en que las condiciones lo requieran, para consolidar la convergencia de la inflación al objetivo de 3.0%.  DM