Si los aficionados celestes esperaban milagros de Tomas Boy, más les vale que tomen una silla y se armen de paciencia. Si bien El Jefe tiene una amplia experiencia a la hora de tomar equipos en desgracia, incluso en zona de descenso, la verdad es que su mano y los buenos resultados podrán verse hasta el siguiente certamen. Así le ha pasado en Atlas, Morelia, Veracruz y la larga lista de equipos a los que Boy les ha echado la mano para sacarlos de la quema.

 

Para recordar un arranque triunfador de uno de los equipos que retomó, hay que remontarse 20 años, cuando todavía la historia dictaba torneos largos y Boy ganó en su relevo como técnico de los Tiburones.

 

De ahí que no fue extraño que el Cruz Azul de El Jefe apenas haya podido empatar el sábado, en su debut en casa ante Dorados de Culiacán, último lugar de la tabla general, principal candidato al descenso de la Liga MX y uno de los peores equipos en calidad de visitante.

 

Boy requiere de tiempo para que su idea futbolística quede clara en sus dirigidos. Como están las cosas y ante los cinco duelos que le faltan a La Máquina en el presente certamen, el futuro no es muy favorable para los seguidores cementeros, que parece tendrán que comerse un cierre de torneo de Apertura 2015 de terror en sus visitas a Pachuca, Torreón y Nuevo León, en la última fecha. Pero sobre todo en el Azul, cuando jueguen ante Veracruz y Toluca, ya que es ante su gente donde más han padecido.

 

Así que los aficionados cementeros ya están avisados. Tomas Boy da resultados, pero no inmediatos, para verlos, según el pasado, tendrán que esperarlo hasta el próximo torneo.