ANKARA. La canciller de Alemania viajó a Ankara para tratar de sellar un acuerdo que permita frenar el incesante flujo de personas de Medio Oriente hacia el Viejo Continente. Tras reunirse con el primer ministro Ahmet Davutoglu, Merkel se mostró lista para “acelerar” el proceso de ingreso de Turquía a la UE y destacó que ese país no recibe “suficiente dinero” para hacerse cargo de los más de dos millones de refugiados sirios que viven en su territorio.

 

“Pacta sunt servanda”, los pactos son para cumplirlos, señaló la mandataria germana. Y aunque precisó que el asunto de la adhesión es uno “de final abierto”, la “mujer fuerte” de Berlín propuso “reformular un proceso más dinámico” y abrir cuanto antes los capítulos 17, 23 y 24 de la negociación, referidos a la política económica y monetaria, a la Justicia y las libertades fundamentales.

 

Otro asunto en la mesa es la exención por parte de la UE de visados para los ciudadanos turcos, que es debatida desde hace años y que pasará a depender del compromiso de Ankara de aceptar la repatriación hacia Turquía de refugiados u otros inmigrantes que hayan incursionado en el espacio Schengen desde suelo turco. Este pacto podría entrar en vigor a partir de junio de 2016, aseguró Davutoglu.

 

Aún falta aplicar este esquema de repatriaciones a personas de terceros países que hayan transitado por Turquía. Hasta entonces, Alemania se compromete a acelerar la “liberalización” de visados dentro del margen del que dispone. En lo que respecta a la propuesta de Bruselas de entregar a Ankara tres mil millones de euros para ayudarle a acoger a refugiados, Merkel admitió que este dinero no debería salir de los fondos que la UE ya había asignado al proceso de adhesión de Turquía.

 

Tras su reunión con el primer ministro turco, la canciller visitó al presidente, Recep Tayyip Erdogan.

 

Hemos comprobado nuestro interés compartido en responder a los movimientos de los refugiados hacia la UE, de una manera que nos permita encontrar posibilidades legales, posibilidades mejores de compartir esta carga con Turquía”, dijo Merkel.

 

Erdogan, por su parte, solicitó que la aceleración del proceso de adhesión tenga también el apoyo de Francia y España. La visita de Merkel ha sido criticada tanto por la oposición alemana como por la turca, que consideran que es una forma de apoyar a Erdogan, cuando faltan dos semanas para las elecciones anticipadas en Turquía. En estos comicios, el partido AKP, fundado por Erdogan, tratará de recuperar la mayoría absoluta que mantenía desde 2002 y perdió en las elecciones de junio.

 

Reker, nueva alcaldesa de Colonia

 

Henriette Reker, candidata independiente a la alcaldía de Colonia y responsable de los programas de acogida de refugiados en esa ciudad alemana, se impuso por clara mayoría en los comicios municipales, celebrados un día después de que un adversario de sus políticas para los solicitantes de asilo la hiriera de gravedad. Reker fue operada el sábado y aún está en el hospital. El conteo parcial de los votos apunta a que la política de 58 años ya superó la marca del 51% de respaldo.