DALLAS. Texas registró entre 2005 y 2013 un aumento en el número de inmigrantes asiáticos y una baja en el de procedentes de México y Latinoamérica, señaló un estudio de la Oficina del Demógrafo de la entidad.

 

“Estamos viendo un dramático aumento en la población nacida en los países asiáticos”, dijo el demógrafo estatal Lloyd Potter, al presentar el estudio.

 

En 2013, el número de inmigrantes asiáticos a Texas fue de 85 mil 542, una cifra muy cercana a la de 92 mil 867 inmigrantes procedentes de Latinoamérica. Sin embargo, de mantenerse la tendencia, la inmigración asiática superará a la latinoamericana en los próximos años.

 

Los inmigrantes asiáticos vienen tanto del este de Asia, especialmente de China, como de las naciones islámicas de Medio Oriente, que es el oeste de Asia, precisó Potter.

 

La población de Texas “es más internacional que en cualquier momento desde que se convirtió en estado hace 170 años”, señaló.

 

El estudio reveló que muchos de los nuevos inmigrantes arriban a Texas directamente desde sus países de origen, aunque un porcentaje significativo llega a la entidad después de haber vivido en otro estado de Estados Unidos.

 

Potter explicó que la razón por la que los inmigrantes están prefiriendo a Texas más que ninguna otra entidad, es simple. Los inmigrantes que llegan a Estados Unidos quieren trabajar “y se dirigen a lugares como Texas, debido a nuestra creciente economía”.

 

“Debido a que la economía de Texas ha estado creciendo más que la de cualquier otra entidad, ésto ha conducido a que tengamos una significativa inmigración”, explico.

 

El estudio mostró que muchos de los nuevos residentes de Texas nacidos en el extranjero viven antes en alguna otra entidad de Estados Unidos, principalmente en California y Florida, y a diferencia de los inmigrantes latinoamericanos no llegan primero a Texas.

 

Actualmente, 39 por ciento de la población de Texas nacida en el extranjero llegó a esta entidad procedente de otra parte de Estados Unidos.

 

La investigación reveló también que los inmigrantes latinoamericanos tienen ahora menos probabilidades de llegar a Texas desde México, el país que ha sido la fuente tradicional de inmigración en Texas desde la década de los años 20.