Jamie Raines, de 21 años, se embarcó hace tres años en el mayor viaje de su vida: pasar de ser una mujer joven a convertirse en el hombre que desde su infancia tuvo consciente que había nacido.

 

Fue entonces que inició un tratamiento hormonal para cambiar de sexo y desde ese momento documentó gráficamente su transformación.

 

Así se tomó día a día una selfie y compartió en la web su time-lapse final que reúne las mil 400 imágenes

 

A medida que las hormonas fueron haciendo efecto, se advierte como Jamie desarrolla vello facial, varios músculos y una voz mucho más profunda.

 

“Lo que quería era que todos vieran cómo la testosterona puede cambiar la cara de una persona. Que la gente vea que este tipo de cambio es posible, es algo bueno. Con el tiempo, el resultado se ha vuelto en algo muy gratificante. Estoy muy contento… Tanto que me gustaría poder seguir haciéndolo cinco años más”, dijo en entrevista a Buzzfeed.

 

Hoy el video de Jaimie suma más de medio millón de visitas.