El encargado de mantenimiento, el gerente operativo de planta, así como el apoderado legal de la empresa Gas Express Nieto fueron vinculados a proceso por el delito de daño a la propiedad pública en agravio del Gobierno del Distrito Federal (GDF), con motivo de la explosión ocurrida en enero pasado en el Hospital Materno Infantil de Cuajimalpa. 

 

Durante el desahogo de la audiencia dentro del sistema oral, el juez 37 del sistema penal acusatorio de delitos no graves del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal, Roberto Castellanos Barroso, hizo la imputación directa a los tres empleados a los que pidió considerar como responsables “por conducta típica omisiva” y daños que ascienden a un monto de 82 millones de pesos por la destrucción del inmueble y de 64 millones 980 mil pesos, relativos a la destrucción de muebles e instrumental.

 

Acompañados de sus abogados renunciaron al término de constitucional de 72 horas para que les fuera determinada su situación jurídica, por lo que el impartidor de justicia determinó hoy mismo vincularlos a proceso.

 

Al encargado de mantenimiento, se le imputa el hecho de haber dado un mantenimiento deficiente al autotanque que provocó la explosión, y al gerente operativo de planta por no ejercer sobre el primero un control debido.

 

La defensa de los imputados alegó que el ministerio público no le había proporcionado documentación necesaria para una adecuada defensa de sus clientes, en específico un dictamen de la Secretaría de Energía.