El llamado de los padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos hace casi seis meses llegó a San Antonio Texas, como primer escala de las doce previstas en la Caravana 43 región Centro, que iniciaron por Estados Unidos.

 

Omar García, normalista sobreviviente del ataque ocurrido la noche del 26 de septiembre en Iguala y Martina de la Cruz, madre de Jhosivani Guerrero de la Cruz, como integrantes de la primer Caravana 43 que partió a primer hora del sábado hacia el vecino país llevaron su denuncia y llamado a  que se sumen a su demanda de justicia.

 

La primera cita fue con activistas de la ciudad de Ferguson, donde en el verano pasado el joven afroamericano Michael Brown fue ultimado por un policía blanco, así como con grupos de chicanos y pueblos originarios de la ciudad texana de San Antonio.

 

Omar escribió vía su Twitter al medio día del sábado “Llegamos a San Antonio, Texas los primeros.. ¡¡Cuántos objetivos!! ¡¡Qué difíciles!! ¡Algo, mucho o poco, lograremos! (sic.)”

 

Después agradeció el recibimiento de los activistas, tras la primer reunión.

 

 

La Caravana 43 se dividió en tres rutas una por el Pacífico, otra por el centro del país y otra por el Atlántico, las cuales se reunirán el 20 de marzo próximo en Nueva York para alzar una vez más su grito de protesta.

 

Se espera que su recorrido se extienda “entre dos y tres semanas” por territorio estadunidense.

 

 

El calendario del recorrido de la caravana por la zona Centro prevé escalas en Austin, Dallas, en Texas; Kansas y St Louis Missouri, entre otras

 

Se espera que este domingo la ruta del Pacífico de la Caravana 43 visite Oregon, donde se reunirá con la comunidad de la Iglesia Católica San Carlos Borromeo y que el lunes ese encuentren con estudiantes de la Universidad Estatal en la ciudad Portland (9:00 horas) y poco después realicen una marcha desde la Universidad al Consulado de México en dicha ciudad (10:30 hora local).

 

En el viaje participarán ocho padres, dos estudiantes y sus abogados, quienes previo a su partida han precisado que viajan “con la intención de informar”.

 

“No vamos buscando ser figuras, ni nada, simplemente que la comunidad mexicana y latina sepan que en México la democracia no existe”, precisó Felipe de la Cruz, vocero de los padres.

 

Esta nueva fase de su lucha busca además sumar a los mexicanos en el exterior en el vecino país, la mayor minoría, a que se sumen a su demanda de justicia no votando el 7 de junio.

 

“Que protesten contra el gobierno, incapaz de encontrarlos (a los estudiantes desaparecidos), y contra toda la clase política mexicana, no pidiendo las boletas” electorales en consulados y sedes diplomáticas de México, con las que pueden emitir su voto, dijo su vocero Felipe de la Cruz.

 

Los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa desaparecieron el pasado 26 de septiembre en la ciudad de Iguala, a manos de policías municipales coludidos con el crimen y miembros del cártel de Guerreros Unidos.

 

De acuerdo con la investigación oficial, los jóvenes fueron asesinados e incinerados en un basurero, una versión en la que no creen los padres de los jóvenes, quienes siguen en su búsqueda y exigen la apertura de nuevas líneas de investigación.

 

A su llegada a Estados Unidos, la caravana fue recibida por el comité de solidaridad con Ayotzinapa en esa ciudad en el aeropuerto.

 

En las paradas de Washington y Nueva York, además los padres prevén reunirse con integrantes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y Amnistía Internacional.

 

Los padres de los estudiantes desaparecidos han encabezado multitudinarias marchas en la ciudad de México, y en febrero viajaron a Ginebra, Suiza, para exponer su caso ante el Comité contra la Desaparición Forzada de la ONU.

 

Además pasaron parte de Nochebuena y Año Nuevo postrados afuera de la residencia presidencial Los Pinos, siempre con las fotos de sus hijos colgando del cuello en demanda justicia y de que el Estado de los entregue vivos.