El deficiente mantenimiento en la pipa propiedad de Gas Express Nieto, que derivó en la fractura de dos tornillos del sistema de trasiego de gas, fue la causa de la fuga que provocó la explosión en el Hospital Materno Infantil de Cuajimalpa del pasado 19 de enero, que dejó un saldo de cinco personas fallecidas, decenas de heridos y la clínica destruida.

 

Esa fue la conclusión a la que llegaron autoridades de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal y la Secretaría de Energía luego de efectuar diversas pruebas científicas y análisis técnicos realizados al auto-tanque que suministraba gas LP a dicho nosocomio. Autoridades prevén sanción para la empresa que podría ser de hasta 42 millones 60 mil pesos y la revocación de permiso para su planta de Tláhuac.

 

“La fuga se generó por la fractura de dos tornillos en la junta de la bomba de trasiego de gas ubicada en la parte media inferior del auto-tanque; la fractura fue causada por la fatiga de los tornillos debido al mantenimiento deficiente lo cual propició el derrame y vaporización del combustible formando una nube que, debido a las propiedades físicas de gas LP y a la inclinación del terreno, se introdujo en las instalaciones del hospital, lo que dio paso a la explosión e incendio”, indicó el procurador general de Justicia del Distrito Federal, Rodolfo Ríos Garza.

 

En una conferencia conjunta, los titulares de ambas dependencias detallaron que una vez dadas a conocer las causas que originaron la explosión, así como las evidencias recabadas en la carpeta de investigación se determinará (en los próximos días) la responsabilidad y vinculación a proceso por los delitos de homicidio, lesiones y daño a la propiedad culposos a quienes resulten responsables.

 

“La acumulación del gas y su desplazamiento, ocasionaron que la nube alcanzara un punto de ignición que dio paso a la explosión e incendio”, indicó Ríos Garza luego de indicar que la pipa habría registrado un derrame de gas líquido, que al evaporarse se combinó con el ambiente y originó una “mezcla explosiva” ya introducida al hospital.

 

Aunque la conclusión de los peritajes, explicados en conferencia por dos peritos especializados apuntó a una “manipulación” debido a que su sistema de trasiego estaba alterado para que el medidor del auto-tanque registrara una cantidad de gas mayor a la que en realidad se suministraba, las imputaciones tanto de la PGJDF como de la Sener no reconocieron un dolo en dichas actuaciones.

 

Ríos Garza advirtió que en los próximos días la procuraduría capitalina solicitará la vinculación a proceso por las imputaciones que se determinen en contra de la persona jurídica (representante de la gasera) así como en su caso de alguna otra persona física que haya derivado de la propia carpeta de investigación. Hasta el momento sólo el operador de la pipa se encuentra en esa condición.

 

En tanto, el secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, informó que se realizaron 12 visitas de verificación a las plantas de Gas Express con las que cuenta en el país, y la Sener abrió ayer un procedimiento administrativo sancionador contra la empresa dirigido a la revocación del permiso de distribución de gas LP, de la planta ubicada en la delegación de Tláhuac.

 

“Se encontraron diversas irregularidades administrativas que la nueva ley de hidrocarburos faculta a la Agencia Nacional de Seguridad Industrial y de protección del medio ambiente del sector hidrocarburos, para sancionar con multas hasta de 600 mil veces el salario mínimo, 42 millones 60 mil pesos (…) Estamos procesando la información y, eventualmente, podrían dar origen estas verificaciones (a otras plantas) a otros procedimientos sancionatorios para la empresa”, señaló el funcionario federal.

 

Cuestionado sobre la aplicación del protocolo de emergencia que presuntamente se llevó al interior del hospital, luego de que los peritajes indicaron que la fuga duró alrededor de 25 minutos antes de la explosión, el titular de la PGJDF sostuvo que el actuar de Protección Civil no fue tardío, pues derivado de ello no hubo tantas muertes que lamentar.

 

“Sí se llevaron a cabo (los protocolos), tenemos declaraciones en la propia carpeta de investigación donde se señala que sí, el encargado de Protección Civil en el propio hospital hizo el llamado para que se evacuara”, dijo Ríos Garza.

 

A fin de corroborar si los peritajes no advirtieron alguna anomalía al interior del sistema de gas del hospital, este diario intentó contactar con el procurador del DF, sin embargo, hasta el cierre no hubo respuesta a la petición, luego de que el área de comunicación social reiteró que la explicación al respecto había sido ofrecida a detalle durante la conferencia.