México busca fortalecer un mercado nacional de bonos de carbono mediante el impulso de proyectos forestales que certifiquen la reducción de emisiones, mismas que se promocionarán para su comercialización con empresas nacionales.

 

La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), a través de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), prepara una norma oficial mexicana para el registro de proyectos y certificación de la reducción de emisiones y capturas del sector forestal, la cual permitirá reducir costos para el desarrollo de proyectos y su verificación, a fin de impulsar el mercado nacional.

 

“Una de las limitaciones que tiene el sector forestal para la participación en el mercado de bonos de carbono es la de los altos costos para la certificación del proyectos y la verificación de resultados, con esta norma se espera que sea más accesible y, por ende, haya más proyectos con bonos emitidos”, dijo a 24 HORAS Jaime Severino, gerente de Proyectos y Mercados Forestales de Carbono de la Conafor.

 

En entrevista, Severino presentó el proyecto de norma, la cual tiene como objetivo facilitar el registro de proyectos forestales a través de la reducción de costos y, una vez que se tenga la verificación de que dichos proyectos pueden lograr la disminución de emisiones, se concretará su certificación para que estén disponible para su comercialización al precio base de los bonos de carbono.

 

El mercado bursátil registra algunos avances en la creación de un mercado de carbono nacional, mediante la apertura en noviembre pasado de la Plataforma Mexicana de Carbono México2, que opera dentro de la estructura de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).

 

En su lanzamiento se dio a conocer como incentivo para las empresas que quisieran participar, que al comprar bonos en apoyo a proyectos sustentables podrían acreditar dichos instrumentos para pagar los impuestos al carbono.

 

A casi un año del lanzamiento de esta Plataforma hay 11 empresas a nivel nacional que han ingresado al mercado local de la generación de bonos de carbono.

 

“Estamos promoviendo un mercado de carbono forestal participando con la plataforma MéxicoCO2 para tener las emisiones de certificados desde el país, y que no sea una entidad externa quien las haga, con lo que se reducirían costos y se facilitaría el mercado nacional.

 

“La idea es facilitar las condiciones para que haya más proyectos y haya una cartera más diversa, con el fin de que haya más compradores y vendedores de carbono a nivel nacional, lo que no limita que se puedan vender al exterior”, señaló Severino.

 

No obstante, el especialista dejó en claro que con la norma se busca potenciar el mercado nacional, ya que a nivel internacional los precios están deprimido, además de que se espera que con los avances en la Convención de Cambio Climático de la ONU y el desarrollo de mercados obligatorios en algunos países, crezca el interés global en adquirir bonos de carbono de países como México.

 

En los últimos años, el precio internacional de bonos de carbono se ha reducido más de 80%. Mientras que en 2008 cada certificado -que equivale a una tonelada de dióxido de carbono que deja de emitirse a la atmosfera- se podían comercializar entre los 23 y 30 euros, hoy en día el precio internacional ronda los seis euros.

 

“Hay varias enseñanzas respecto al mercado internacional de bonos de carbono, entre ellas se están fortaleciendo los mercados nacionales o regionales, lo que no existía porque sólo habían los mecanismos bajo la Convención y Protocolo de Kioto. Con esto también podríamos pensar en un mercado regulado en México, en tanto que actualmente es voluntario, aunque aún no hay una posición fija en el país”, indicó Severino.