El procurador de Justicia de Guanajuato, Carlos Zamarripa Aguirre, afirmó que la policía local no tiene relación con la muerte del menos Ricardo de Jesús Esparza e insistió que el joven falleció debido a que cayó de una altura de tres metros al tratar de bajar del techo de una vivienda.

 

En conferencia de prensa, el funcionario local indicó que la fiscalía analizó 788 horas de video de las 64 cámaras ubicadas en las plazas y calles en las que transitó el joven estudiante; y detalló que hay grabaciones y fotografía desde que Ricardo llegó a la Central Camionera de Guanajuato hasta las 04:49 horas del domingo, antes de su detención.

El procurador explicó que en el video se observa que en la mañana del sábado, Ricardo Esparza es abordado por dos policías quienes respondieron a un reporte de una persona que estaba orinando en la vía pública, por lo que los agentes lo llevaron a la puerta de la casa donde había orinado para que pidiera perdón a la propietaria de la casa.

 

Resaltó que nunca el joven nunca estuvo detenido.

 

Declaran cuatro testigos por muerte de Ricardo Esparza

 

Cuatro testigos más que presenciaron como Ricardo de Jesús Esparza, alumno de la Universidad (UdeG) quien apareció muerto en Guanajuato después de ser detenido por policías durante el Festival Internacional Cervantino, se presentaron a declarar sobre los hechos.

 

Alrededor de las 14:30 horas agentes del Ministerio Público de Guanajuato arribaron al Centro Universitario  de los Lagos, en Lagos de Moreno, para tomar las versiones de dos chicas y dos chocos que dijeron poder aportar más elementos; sin embargo, esta vez las autoridades universitarias recomendaron a los estudiantes guardar discreción al respecto  para no entorpecer las investigaciones.

 

Para esta nueva diligencia se solicitó la presencia de un visitador de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Jalisco, pues la abogada Guadalupe Salas Lugo, quien asesora legalmente a los alumnos del CU Lagos, acusó que durante la toma de la declaración al testigo principal, Daniel de León, los gantes presionaron al joven con preguntas que tenían que ver más con el ámbito personal y sentimental que con los hechos concretos del caso.

 

Afuero del sitio en que los agentes se encerraron con los testigos y sus asesores, se mantenían alrededor  de 300 estudiantes que los esperaban con pancartas para manifestar su apoyo y solidaridad con sus compañeros.

MG