Ciclismo de ruta con sabor diferente. Ciclismo de ruta con aroma al mejor café del mundo. Ciclismo de ruta, el de los ya muy próximos Juegos Centroamericanos y del Caribe, que transcurrirá junto a las plantaciones de café, con ramas llenas de granos asomando a cada kilómetro de competencia, con posibilidades de degustación a cada esquina y pedal.

 

La vigésimo segunda edición de los Juegos Centroamericanos y del Caribe, que se extenderá a todo lo largo del estado de Veracruz, ha dejado para la localidad cafetalera de Coatepec precisamente las pruebas de ciclismo de montaña y ciclismo extremo, además de ciclismo de ruta en sus dos modalidades: tanto el gran fondo como la emocionante contrarreloj.

 

Coatepec, que se ubica a ocho kilómetros de Xalapa y a 120 del puerto jarocho, reúne las condiciones geográficas para cultivar café de altura. Es decir, entre 900 y 1,500 metros sobre el nivel del mar. Eso y su clima garantizan el sabor, la acidez, la calidad necesarios.

 

ciclismo-rutaMuy cerca de una empinada curva que espera a los ciclistas en los Juegos Centroamericanos y del Caribe, que se disputarán del 14 al 30 de noviembre, se encuentra el Museo del Café.

 

Arturo Apan nos recibe con rostro de orgullo por lo que ese día nos podrá mostrar. Es la finca cafetalera que pertenece a su familia, la posibilidad de adentrarnos en el proceso de cosecha y producción, el privilegio de poder degustar la mejor taza y ver una serie de antigüedades relacionadas con el mundo cafetalero. En resumen, la pasión de varias generaciones por todo lo que rodea, desde la siembra hasta el consumo, a esa bebida.

 

No hace falta que nos explique que Coatepec tiene elementos para competir con las localidades más posicionadas del mundo en tema cafetalero. No es sólo la exquisitez que nos sorprende en esos sorbos, sino también todo el contexto en este pueblo montañoso de calles empedradas, de fachadas coloridas, de orquídeas omnipresentes, de haciendas que vivieron la evolución de esa localidad: empezaron por trabajar la caña de azúcar y tiempo después, cuando llegó el grano de café (se cree que de Cuba), cambiaron de planta. Siempre, bajo el olor a café horneado y con la proximidad del acceso al Cofre de Perote.

 

Muy cerca de Coatepec, y de los pedales centroamericano-caribeños, se encuentra otra joya veracruzana, el pueblo mágico de Xico.

 

Un tapete de aserrín de 200 metros ha sido desplegado ese día. Son obras de arte que incluso pueden llegar a los dos kilómetros en jornadas de fiesta de La Magdalena o peregrinaciones. Tan difícil como para quienes los crean, es caminar por encima de ellos, temerosos de perjudicar una soberbia composición nacida para irse desgastando a cada paso. Arte de lo efímero, nos explica el artista José Luis Zacarías, tan renombrado que estuvo durante la pasada Navidad en el Vaticano colocando un largo tapete de aserrín, lo que le permitió conocer a Su Santidad, el papa Francisco.

 

El tapete de aserrín nos conduce a los sabores locales; al tamal de queso de cabra en hoja de xoco, a las enchiladas de nata, al tamal de arroz…, y al cierre indispensable: esa taza de café, consumida mientras la neblina se disipa un poco y descubrimos la cercanía de otra montaña. Montaña que será surcada por bicicletas a partir del 14 de noviembre, en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Veracruz 2014. Sin duda, la ruta de ciclismo más cafetalera.