MONTEVIDEO. Las relaciones diplomáticas entre Uruguay e Israel se tensaron como consecuencia del conflicto bélico en Gaza, surgieron declaraciones cruzadas y el Gobierno del presidente José Mujica decidió “observar severamente” al cónsul israelí en Montevideo, confirmaron fuentes oficiales.

 
Ron Gertenfeld será convocado al Ministerio de Relaciones Exteriores para hacerle conocer el “fuerte malestar” del Gobierno uruguayo por sus declaraciones.

 

Mujica calificó el pasado lunes de “genocidio” la ofensiva de Israel en la Franja de Gaza al considerar que, además de a objetivos militares palestinos, está dirigida contra la población civil.
Anteriormente, el Gobierno uruguayo emitió un comunicado en el que “deploró” las operaciones militares en Gaza, calificó de “repudiable” el ataque de Israel contra una escuela de la ONU y pidió un “urgente alto al fuego incondicional y definitivo”.

 

El cónsul de Israel respondió a Mujica y en declaraciones al canal local de televisión VTV dijo que demuestran “ignorancia” y generan “antisemitismo”.

 

El mandatario uruguayo volvió a la carga y en la víspera tras finalizar un acto público afirmó que “nadie” lo puede acusar de antisemitismo y destacó que en su gobierno tiene tres ministros de origen judío.

 

El canciller uruguayo, Luis Almagro, en un reportaje que publica el semanario Búsqueda, dijo que las declaraciones del cónsul israelí “no han sido de rebatir argumentos, porque capaz que no los tiene, pobre, sino de clasificar, lo cual es inadmisible”.

 

En medio de las discrepancias, la administración de Mujica decidió acelerar la apertura de una embajada en Palestina, aprobada tiempo atrás.
Quien también ha confrontado diplomáticamente a Israel es Perú, quien decidió llamar a su embajador en Tel Aviv. Sin embargo, el enojo ha pasado al Congreso. Ayer, el congresista Daniel Abugattás, uno de los principales representantes del gobernante Partido Nacionalista Peruano (PNP), afirmó que el gobierno de su país debe “botar a patadas” al embajador de Israel.

 

Abugattás declaró esto a los periodistas al comentar unas declaraciones que ofreció la semana pasada el embajador israelí, Modi Ephraim, en las que dijo que Perú había “premiado a los terroristas” al llamar a consultas a su embajador en Israel en rechazo a la ofensiva militar en la Franja de Gaza.

 

 

También ayer, Israelíes y palestinos entran en su tercer y último día de tregua acordada con Egipto para negociar una salida al conflicto armado en Gaza, a la espera de que sus gobiernos acepten una nueva prórroga en el cese de las hostilidades.

 

Este espacio de calma abierto en medio de un conflicto que deja ya más de 1,880 personas muertas en Gaza permitió a la población de la Franja retomar un resquicio de normalidad entre un paisaje de devastación.

 

 

El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, afirmó que considera “inevitable” que haya víctimas civiles en la actual ofensiva contra Hamás en Gaza, pero responsabilizó de esas muertes al movimiento islamista.

 

“Lamentamos cada víctima civil, pero son responsabilidad de Hamás, que lanza cohetes contra nuestras ciudades (…) y lo hace desde lugares donde hay civiles: hospitales, escuelas, mezquitas”, indicó Netanyahu en una entrevista concedida a la cadena francesa “i-Télé”.