Los ciudadanos de México, Guatemala, Honduras y El Salvador están entre las principales víctimas de los abusos cometidos por los traficantes de personas en Estados Unidos, según un informe del Departamento de Estado publicado hoy.
“Estados Unidos es fuente, lugar de tránsito y destino de hombres, mujeres y niños, tanto estaduunidenses como extranjeros sometidos a la trata sexual y a trabajo forzado, incluido la servidumbre doméstica”, indica el documento.
El Departamento de Estado presenta anualmente un informe sobre el tráfico y trata de personas en el que analiza la situación de 189 países en relación al cumplimiento con la Ley de Protección a las Víctimas de Tráfico (TVPA, por su sigla en inglés).
El gobierno estadunidense señala que del total de casos analizados en el año fiscal 2013 (de octubre 2012 a septiembre de 2013) la mayoría de las víctimas procedieron de Estados Unidos, México, Filipinas, Tailandia, Honduras, Guatemala, India y El Salvador.
La trata, advierte, puede darse tanto en el mercado legal como ilegal, que incluye burdeles, servicios de acompañantes, salones de masajes, prostitución, servicios de hoteles, agricultura, manufactura, construcción, cuidado de mayores y servicio doméstico.
El gobierno alerta además de que entre las víctimas del tráfico humano han identificado individuos venidos de terceros países tanto de manera legal como ilegal, incluso participantes en programas de visas temporales para trabajadores.
El informe recoge las denuncias aparecidas en la prensa sobre abusos cometidos por empleados de subcontratistas del Pentágono en Afganistán a ciudadanos locales y las de ONG que alertan de que ciudadanos extranjeros con visa de trabajo, empleados como servicio doméstico para diplomáticos o miembros de organizaciones internacionales en Estados Unidos, “han sido sujetos de trabajo forzado”.
El Departamento de Estado subraya la “vulnerabilidad” de las niñas y las mujeres nativas americanas de caer en manos de traficantes de sexo, así como de los jóvenes LGTB, algunos de los cuales son obligados a prostituirse a cambio de hormonas.
El informe recomienda aumentar la vigilancia para identificar a las víctimas del tráfico de personas, mejorar la coordinación de los servicios del sistema judicial e informar de sus derechos a los empleados traídos por personal diplomático.
Durante el año fiscal 2013, 16 equipos del Departamento de Justicia llevaron a cabo 828 investigaciones relacionadas con 717 sospechosos de haber participado en redes de tráfico de personas, frente a las 753 investigadas en el mismo periodo un año antes.
“EU es el primero en reconocer que ningún Gobierno hace lo suficiente”, afirmó el secretario de Estado, John Kerry, durante la presentación, en la que indicó que la trata humana afecta a más de 20 millones de personas, mientras que los explotadores ganan más de 150.000 millones de dólares anuales.