La empresa de bienes raíces Fibra Uno seguirá invirtiendo y apostando por México, pese a la nueva regulaciones para limitar la deuda y cifras decepcionantes de la economía.
“Nuestra apuesta es por México y queremos que siga creciendo”, afirmó André El-Mann, director general de compañía.
“Tenemos mucha fe de que el sector inmobiliario crecerá junto con la economía mexicana”, manifestó el responsable de la compañía que se dedica a la adquisición, desarrollo, renta y operación de desarrollos inmobiliarios en México.
Según el empresario, la única forma para que tenga un crecimiento y desarrollo su negocio es a través del mercado de capitales o la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).
“Mientras sigamos invirtiendo en forma razonable recurrimos al mercado de capitales”, expresó el directivo tras dar el timbrazo en el centro bursátil en una colocación realizada el 11 de junio de 2014 por cerca de 32 mil 816 millones de pesos entre inversionistas nacionales e internacionales.
“Los inversionistas que participaron en la colocación fueron de Estado Unidos, Europa, Sudamérica y Asia. Básicamente todos los inversionistas institucionales”, recordó El-Mann.

 

 

Confianza

Existe un “apetito brutal” por invertir en el territorio nacional, a pesar de que la economía mexicana tuvo un decepcionante primer trimestre, afirmó por su parte Luis Robles Miaja, vicepresidente Ejecutivo de la Asociación de Bancos de México (ABM).
Una muestra de la confianza fue la colocación de la Fibra Uno en el mercado accionario nacional por 5 mil 200 millones de dólares, lo que habla de la confianza del sector inmobiliario, dijo el presidente del Grupo Financiero BBVA Bancomer y colocador de la oferta pública inicial de la operadora de bienes inmobiliarios.
“Los inversores han mostrado su confianza y certidumbre en el desarrollo del país, sobre todo con el proceso de transformación que está impulsando el gobierno federal, y que ha captado la atención de inversionistas sobre todo extranjeros que esperan reglas para traer su capital a las áreas de desarrollo”, expresó Robles Miaja.
Se ha reportado una caída en el volumen del mercado accionario, sin embargo, no se debe al rumbo de la economía mexicana, sino es un comportamiento mundial, apuntó Luis Téllez Kuenzler, presidente de la Bolsa Mexicana de Valores.
“La colocación de la Fibra Uno en el mercado accionario nacional, es la más importante en América Latina, lo que habla de la confianza y desarrollo en el sector inmobiliario y por ende en nuestro país”, agregó.

 

Nuevas reglas

La Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) emitió las nuevas regulaciones aplicables a las Fibras que incluyen un límite de apalancamiento de 50%, una razón de servicio mínimo de la deuda de 1.0 veces; además de temas de gobierno corporativo como políticas para cambiar administrador, contratación de deuda y remuneraciones.
La nueva regulación para Fibras entrará en vigor a partir del 24 de junio próximo y establece como límite máximo de endeudamiento el 50% del valor contable de sus activos, medidos al cierre del último trimestre reportado.
“La regulación la vemos con muy buenos ojos y la autoridad tuvo una muy atinada decisión en poner un límite al endeudamiento”, aseguró André El-Mann.
“Nosotros teníamos auto impuesto un límite de 50% de endeudamiento y es más o menos lo que viene en la nueva regulación y básicamente está basada en nuestro modelo. Es muy sano en la industria en la etapa en la que se encuentra actualmente”, dijo el directivo de Fibra Uno.
“Las reglas emitidas por la CNBV son razonables y establecen una estructura financiera sana para los instrumentos”, manifestó Luis Téllez Kuenzler.
“De manera prudencial la nueva regulación de la CNBV no es algo equivocado”; añadió Luis Robles Miaja.
Agregó que la decisión adoptada por los reguladores no frenará el apetito de los inversionistas por incursionar a las Fibras.
“La sobre demanda por Fibra Uno demuestra el apetito y la confianza que existe por el mercado de bienes inmobiliarios en la República Mexicana”, manifestó el banquero.

 

 

Inversión en España
En febrero de 2014, un grupo de inversionistas mexicanos, liderados por Moisés El-Mann, presidente de Fibra Uno, compraron 100% de la compañía española ISC Fresh Water Investment, dueña de 253 sucursales bancarias en España, por unos 290 millones de euros (400 millones de dólares), a través de Branch Management, SAPI de CV.
Estas sucursales bancarias representan una de las mayores inversiones en el mercado inmobiliario español realizadas por inversionistas mexicanos.
—¿Qué harán con los inmuebles comprados en España? —, se le cuestionó a André El-Mann.
—Eso se compró a través del grupo y están ahí.
Fue un bueno momento para invertir y fue una inversión patrimonial.
—¿Les satisface la inversión?
—Lo que hicimos fue comprar sucursales bancarias de Sabadell, que están funcionando y se hizo un solo contrato. Nos tiene muy contentos.
—¿Sólo en España invertirán?
—Sí.