México tiene la oportunidad histórica de transformar a su sector energético en uno moderno, productivo y competitivo, y por ello es trascendental contar con un marco legal adecuado, destacó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

 

La dependencia federal afirmó que esto permitirá atraer inversiones productivas, mejorar la competitividad de las empresas, crear más empleos mejor remunerados y mejorar la calidad de vida de las familias mexicanas.

 

En el Informe Semanal de su Vocería, recordó que las modificaciones constitucionales de la reforma energética fueron aprobadas en diciembre de 2013, y esta semana iniciaron las discusiones sobre las iniciativas secundarias, presentadas el pasado 30 de abril.

 

Los objetivos

 

Refirió que el gobierno de la República estableció dentro de los objetivos del Plan Nacional de Desarrollo (PND) abastecer de energía al país con precios competitivos, calidad y eficiencia a lo largo de toda la cadena productiva.

 

Para ello, agregó, se deberá aumentar la capacidad del Estado para asegurar la provisión de petróleo crudo, gas natural y gasolinas que demanda el país, y fortalecer el abastecimiento racional de energía eléctrica; promover el uso eficiente de la energía.

 

Asimismo, el aprovechamiento de fuentes renovables, mediante la adopción de nuevas tecnologías y la implementación de mejores prácticas, y a través de la reforma energética se crearán las condiciones para lograr este objetivo, subrayó.

 

Los desafíos

El sector enfrenta grandes desafíos que limitan su potencial. Pese a que el Estado ha destinado presupuestos de inversión a Petróleos Mexicanos (Pemex) cada vez mayores, la producción de hidrocarburos no ha podido revertir su tendencia decreciente.

 

Apuntó que el efecto de la caída en la producción no se ha sentido en las finanzas públicas porque los precios del crudo se han mantenido en niveles elevados, pero la tendencia negativa en la producción de hidrocarburos líquidos es preocupante, pues el sector petrolero representa la tercera parte de los ingresos del sector público.

 

México está considerado como el sexto lugar mundial en recursos de gas de lutitas (shale gas) pero actualmente importa la tercera parte de la demanda de gas natural.

 

Existen estudios que señalan la existencia de 26 mil millones de barriles de petróleo crudo equivalente sin explorar en aguas profundas, pero para desarrollar estos recursos prospectivos, se requieren grandes inversiones que ninguna empresa en el ámbito internacional realiza por sí sola.

 

En el sector eléctrico, la falta de gas hace producir con otros combustibles que son más caros y dañan al medio ambiente, indicó.