SAN PETERSBURGO. Unos 500 insurgentes pro rusos atacaron a militares del gobierno ucraniano en el este del país, en un enfrentamiento que dejó 20 separatistas muertos, informó el Ministerio de Defensa de Ucrania.

 

El ministerio informó este viernes que el enfrentamiento tuvo lugar el jueves cuando un convoy militar ucraniano fue atacado afuera de la aldea oriental de Rubizhne.

 

La oficina agregó que un soldado murió la madrugada del viernes en otra batalla por separado cerca de la misma zona.

 

La información se conoció después de que el presidente ruso Vladimir Putin dijera que Rusia reconocerá el resultado de las elecciones presidenciales de este fin de semana en Ucrania, mientras manifestó su esperanza de que terminen las acciones militares en el este ucraniano.

 

En Kiev, el líder ucraniano exhortó a todos los electores a participar en la crucial jornada electoral para “cimentar las bases de nuestra nación”, mientras en el este de Ucrania insurgentes pro rusos se siguen enfrentando con fuerzas del gobierno.

 

Al hablar en un foro realizado en San Petersburgo, Putin dijo que Rusia “respetará la elección del pueblo de Ucrania” y trabajará con los nuevos líderes. Dijo que Rusia quiere que la paz y el orden sean restaurados en Ucrania.

 

Al mismo tiempo, expresó su esperanza de que el nuevo líder de Ucrania termine con las acciones militares en el este de Ucrania.

 

Los comicios presidenciales están previstos para el domingo.

 

Anteriormente, el presidente acusó a Occidente de fomentar un “golpe de Estado” en Ucrania, cuando el entonces presidente pro ruso fue derrocado, y por hacer caer al país en lo que Putin describió como “el caos y una guerra civil en pleno”.

 

En tanto, en un mensaje televisado desde Kiev, el presidente ucraniano en funciones Oleksandr Turchynov, quien no participará en las elecciones, enfatizó la importancia de la jornada del domingo.

 

“Hoy, estamos construyendo un nuevo país europeo, la base en la cual millones de ucranianos han demostrado que son capaces de defender sus propias decisiones y su país. No permitiremos jamás que nadie nos robe nuestra libertad e independencia y convierta a Ucrania en parte de un imperio post Soviético”.

 

Por su parte, el ministro del Exterior de Rusia Serguéi Lavrov acusó el viernes a Occidente de provocar la crisis en Ucrania por su “megalomanía” e hizo un llamado para alcanzar una solución basada en el interés mutuo.

 

“Si queremos sinceramente ayudar al pueblo ucraniano a superar esta crisis, es necesario abandonar el tristemente célebre juego de suma cero (donde nadie gana), dejar de alentar los ánimos xenófobos y neonazis y eliminar la peligrosa megalomanía”, declaró Lavrov en un discurso ante una conferencia de seguridad en Moscú organizada por el Ministerio de Defensa.

 

En la misma conferencia sobre seguridad, el jefe del estado mayor general de las fuerzas armadas rusas, general Valery Gerasimov, culpó a Occidente de alentar las protestas masivas que causaron en febrero la caída del presidente pro ruso Víctor Yanukóvich.