Fausto Vallejo Figueroa, gobernador de Michoacán, se deslindó del caso Jesús Reyna al afirmar desconocer que su ex secretario de Gobierno tuviera vínculos con el crimen organizado que azota a la entidad, además de no saber que se había reunido con integrantes de Los Caballeros Templarios, principalmente con su líder Servando Gómez Martínez, La Tuta.
“El gobernador no estaba enterado (…), y si lo hubiera sabido no hubiera sido copartícipe de esas acciones”. “No estaba enterado”, sentenció el mandatario estatal en entrevista con Radio Fórmula.
Vallejo Figueroa agregó que él no mandó ni a Jesús Trinidad Martínez Pasalagua ni a Jesús Reyna o a parte de su equipo de campaña a tener encuentros con los criminales; así como tampoco fue informado de estas reuniones, destacando que el propio Martínez Pasalagua “no quería participar en mi campaña”.
El mandatario estatal sostuvo que en Michoacán se está restableciendo el Estado de Derecho y destacó que “cada quien es responsable de su conducta” y que en el territorio purépecha no hay impunidad, sin importar de quién se trate.
Finalmente lamentó esta situación, calificándola como “una desgracia” que no sólo afecta al estado de Michoacán sino también al gobierno y a la familia de Jesús Reyna García.
Encarcelan a Jesús Reyna por apoyar a Templarios
Ayer, un juez federal ordenó la detención formal y encarcelamiento de Jesús Reyna, por la supuesta colaboración que habría dado a Los Caballeros Templarios para traficar drogas en el estado durante varios años.
La Procuraduría General de la República (PGR) reveló que existen pruebas que confirman que el también ex secretario de gobierno se reunió con líderes del grupo delictivo. Lo que sigue sin estar claro, al menos públicamente, es qué tipo de apoyo habría prometido el político, quien estuvo 35 días bajo arraigo.
“Durante el periodo de arraigo de Reyna García, el Ministerio Público obtuvo entre otros medios de prueba diversas declaraciones ministeriales que confirmaron que sostuvo varias reuniones con integrantes de la delincuencia organizada, así como informes de varias autoridades y pruebas periciales que confirmaron lo anterior”, dijo ayer en conferencia Rodrigo Archundia, titular de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO).
El funcionario explicó que el caso es resultado de una averiguación que paulatinamente fue trabajando la Procuraduría respecto a la protección institucional que recibieron Los Templarios en Michoacán, y que entre otras cosas incluye rastreos financieros y diversas pruebas periciales.