El gobierno federal y agrupaciones campesinas trazaron la ruta para la reforma al campo que rediseñará las políticas públicas en el agro mexicano. La iniciativa de reforma, acordada por ambas partes, se presentará en septiembre próximo en el periodo ordinario de sesiones en el Poder Legislativo.

 

Ayer, en la sede de la Secretaría de Gobernación (Segob), se instaló la Comisión Permanente para la Transformación del Campo, integrada por el subsecretario de Gobernación, Luis Enrique Miranda, las secretarías de Agricultura de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) y de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu). El Congreso Agrario Permanente (CAP), representará a las organizaciones campesinas de todo el país.

 

En el encuentro, el coordinador nacional del CAP, José Durán Vera, advirtió a la Federación que cualquier intento de imponer una visión o excluir la voz de los campesinos, así como manipular el proceso, pondrá en peligro la reforma al campo.

 

“Creemos que hay que tener mucho cuidado con la conducción que se haga del proceso. Estaremos pendientes de que se quiera imponer una visión o excluir la voz de los campesinos, ni se manipule de tal manera que el proceso se eche a perder cuando ya el presidente de la República, Enrique Peña Nieto, ha puesto su palabra para conformar una verdadera reforma al campo”, sostuvo.

 

Luego de la reunión, que se alargó por más de tres horas, la ruta quedó definida. A partir del 30 de abril comenzarán seis foros temáticos, 32 foros por todo el país (uno en cada entidad), así como un foro en la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago) y en el Poder Legislativo, en los que participarán agricultores, académicos, legisladores, gobierno federal y secretarios estatales.

 

En su primera parte, la reforma al campo propone un rediseño de políticas públicas que tengan que ver con las atribuciones del Ejecutivo, es decir, habrá modificaciones en los programas, instrumentos y presupuestos de política pública agropecuaria, forestal y acuícola.

 

La segunda etapa, será la modificación y reglamentación de leyes secundarias y creación de nuevas leyes que se presentará al periodo ordinario de sesiones en septiembre.

 

LA PROPUESTA DEL CAP

 

En las mesas, el Congreso Agrario Permanente propondrá que se modifique la estructura de programas para generar equidad, así como distribuir de manera equitativa el presupuesto. Además, el CAP pide la construcción de infraestructura hidroagrícola, así como caminos rurales y sistemas de almacenamiento y de transporte para mover los alimentos que producen los campesinos.

 

La otra parte, es el mantenimiento de los programas de subsidios; la propuesta es que deberán llegar con reglas más sencillas para productores, campesinos, ejidatarios, comuneros, así como pequeños propietarios con la finalidad de fortalecer y capitalizar su economía.

 

Finalmente, proponen la protección de derechos humanos, por ejemplo, en los territorios indígenas del país, así como una política social no clientelar que resuelva de manera productiva el problema de la miseria y hambre de los mexicanos.