Las decisiones se están tomando sin perder tiempo y sin dar tregua alguna a Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre.

 

Por lo pronto, desde la sede nacional del tricolor están apuntando hacia un perfil “recio, recto, carismático” para dirigir el PRI-DF.

 

Y el nombre que más está sonando bajo esas características -y sí que las tiene, fue un magnífico presidente municipal- es el del ex alcalde de la ciudad de Oaxaca (2007-2010), José Antonio Hernández Fraguas.

 

La idea, por lo que nos cuentan algunos priistas, es que el oaxaqueño asuma como presidente en funciones del PRI local, y que el ex gobernador tabasqueño, Manuel Andrade, permanezca como delegado del Comité Ejecutivo Nacional en el DF.

 

Los priistas van -como han apuntado ya diversos analistas- por la reconquista de la capital del país. Y según sostienen desde el búnker de Insurgentes Norte, “es ahora o nunca”.

 

Y es que se abre una coyuntura que no volverá a repetirse: la división del PRD y el impedimento de Morena en esta elección (por ser la primera en la que compite) para ir en coalición.

 

El PRI a su vez puede aliarse con el Partido Verde y con Nueva Alianza -e inclusive con Acción Nacional-  y arrancarle a la izquierda su gran bastión.

 

Esa es la ventana de oportunidad por la que van. Y para ello necesitan, no un nombre de prosapia, sino a una figura fuerte, trabajadora y respetada al frente.

 

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LA ENTREVISTA LO SENTENCIÓ.- Hace un par de semanas Gutiérrez de la Torre dio una entrevista a El Universal en la que “se colgó solito”, según describen sus propios compañeros. En ella declaró que todas las candidaturas para el 2015 tendrían que pasar por él:

 

“Yo fui electo para cuatro años y lo que se tenga que firmar de candidaturas del 2015, lo firmaré yo, no el Comité Ejecutivo Nacional. Las diputaciones locales y candidaturas delegacionales, las firmo yo”, sostuvo.

 

Ante semejantes declaraciones -nos relatan-, en PRI nacional (y en Los Pinos) levantaron las cejas y nomás dijeron: ¿Ah, sí…?

 

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YA LO HABÍAN EXPULSADO DEL PRI.- El diputado Francisco Arroyo Vieyra recordaba ayer que él -en funciones de presidente de la Comisión de Justicia Partidaria del PRI- había expulsado del partido a Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre en 2009:

 

“Fue porque agarró a María de los Ángeles (Moreno) y a Beatriz (Paredes) a sillazos por un Consejo Político Nacional…”

 

Pero el Tribunal Electoral desechó las acusaciones diciendo que “no había nexo causal”  y “el basuritas” recuperó sus derechos. Y ahora que Gutiérrez de la Torre se ve envuelto en un nuevo escándalo, el guanajuatense insiste: “Yo tenía razón”.

 

Por cierto que a Arroyo Vieyra le tocó llevar los procesos de tres expulsiones: el de Elba Esther Gordillo, el de Wintilo Vega y el de Gutiérrez de la Torre. (Sólo éste último fue recurrido).

 

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 MARVÁN BIEN VALE LA ESTABILIDAD DEL INE.- Todavía el miércoles por la noche el nombre de María Marván Laborde -afín al PAN- se mantenía en la lista de los 11 consejeros que integrarían el Instituto Nacional Electoral (INE). Pero ayer por la mañana, Juan Molinar Horcasitas (el negociador de Acción Nacional) apareció “abriéndose las venas” y finalmente obligó al cambio que dejó fuera a la presidenta del IFE.

 

Valga en su descargo, sin embargo, que en cuestión de números no les quedaba otra a los panistas, pues habían dejado a Marván por tres años, al igual que otra de sus propuestas: la de Arturo Sánchez Gutiérrez, también por tres años.

 

Con los cambios que se hicieron en las últimas negociaciones -la incorporación de Beatriz Eugenia Galindo (cercana al PRI) y de José Roberto Ruíz Saldaña (PAN)- fueron los números, la permanencia. Porque con estos movimientos los panistas ganaron un consejero afín por seis años más (Marván iba sólo por tres años y Ruiz Saldaña va por nueve).

 

Además, según nos explicaron, se está construyendo que la próxima legislatura pueda procesar (en el 2017) de manera equitativa las candidaturas de los Consejeros de nueve años que hacen ya el escalonamiento definitivo del INE. En otras palabras -y a diferencia del pasado-, se buscó la estabilidad del INE en su primer relevo.

 

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GEMAS: Regalito de Luis Mancera de Arrigunaga, vicepresidente jurídico regulatorio de Televisa: “Pareciera que la concesión de Telmex es a veces la Constitución”.