A un mes de que se inició la averiguación previa, Jesús Murillo Karam reconoció que la PGR ha avanzado despacio en la identificación y detención de los probables responsables del fraude cometido por la empresa Oceanografía SA, pues subrayó que se requieren pruebas contundentes para formular una acusación sólida.

 

Al comparecer ante los legisladores en la Cámara de Diputados, Murillo prometió que no habrá impunidad, pero dijo que sólo hasta que haya evidencia que derive en órdenes de aprehensión es cuando se hablará de culpables, con nombres y apellidos. “Yo podría decir que en lo que vamos más atrasados es en la identificación de los probables responsables, pero así es porque tenemos que ser cuidadosos (…) las acusaciones deben estar sustentadas para que al llegar ante el juez no las revoquen fácilmente y salgan en libertad”, explicó.

 

Murillo Karam reveló que para identificar la forma en que se cometió el fraude y fueron blanqueados los recursos de parte de Oceanografía SA, los peritos y fiscales están verificando registros de contabilidad, reportes fiscales y financieros y demás diligencias que permitan ubicar el movimiento del dinero. Dijo, además, que se están realizando verificaciones con otras entidades y empresas e, incluso, intercambio de información con otros países donde la empresa de Amado Yáñez Osuna tenía contratos o alianzas con otras entidades privadas.

 

“Se trata de una investigación que avanza despacio, pero será contundente (…) no vamos a permitir que exista impunidad. Los recursos públicos, privados, deben ser respetados”, aseveró. El Procurador insistió en que la actuación de los fiscales, tras conocer sobre el fraude, no fue integrar de inmediato el expediente y solicitar órdenes de aprehensión, pues sostuvo que eso hubiera dañado a una empresa privada de la que dependen 11 mil personas, así como a los servicios que brinda a Petróleos Mexicanos (Pemex) con los recursos energéticos de todo el país.

 

En vez de ello, dijo, se optó por una ruta más cuidadosa, que ha incluido el aseguramiento de los bienes a través de Hacienda. Se trata de que los acreedores, agregó, puedan recuperar en la medida de lo posible el dinero que fraudulentamente se otorgó a la empresa. El titular de la PGR insistió en que no hay alguna finalidad política o partidista en el caso y prometió que los que resulten responsables serán por los hechos que hayan cometido y no por el partido al que pertenezcan.

 

Niega facturas falsas El Procurador subrayó que la mecánica que utilizó Oceanografía S.A. para obtener los créditos irregulares en Banamex no incluyó facturas falsas, como se publicó en algunos medios y señalado por los diputados, sino que la operación irregular fue

 

con estimaciones fraudulentas de servicios que supuestamente se otorgarían a Pemex. El banco al verificar con la paraestatal, explicó Murillo, se percató que las estimaciones que realizó Oceanografía eran irregulares, pues sólo amparaban inversiones por 200 millones de dólares. El procurador hizo hincapié en no precisar el monto total de las afectaciones, al tiempo que apuntó que el monto del fraude llevará más tiempo.

 

Aclaró que fue en Tabasco donde se presentó la primera denuncia formal en torno al asunto, la cual fue atraída por la PGR. “El 10 de febrero Banamex presenta una querella por robo en Tabasco. Denuncia que uno de sus empleados se robó unos documentos. Es ahí donde intervenimos porque nos enteramos que hay una denuncia por robo de unos documentos que involucra a una empresa con contratos federales”, indicó