LONDRES. El euro alcanzó el viernes su nivel más alto frente al dólar en casi dos años y medio, después de conocerse la decisión del Banco Central Europeo (ECB por sus iniciales en inglés) de no recortar más las tasas de interés.

 

En un momento del viernes, la divisa utilizada por 18 naciones de la Unión Europea subió a mil 3917 dólares, su máximo desde que alcanzó mil 4170 dólares en octubre de 2011.

 

La unidad monetaria retrocedió después de un reporte, más sólido de lo esperado, sobre la creación de empleos en Estados Unidos durante febrero.

 

Los 175 mil  puestos de trabajo abiertos en Estados Unidos superaron el pronóstico general en los mercados que esperaba un aumento de aproximadamente 150 mil. Como resultado, los analistas dijeron que la Reserva Federal de Estados Unidos probablemente continuaría reduciendo su estímulo monetario, proporcionando un pequeño incentivo al dólar.

 

Sin embargo, los analistas creen que el euro está en camino a repuntar más en los próximos días, debido mayormente a la decisión del jueves del ECB de no reducir las tasas de interés después de una serie de cifras económicas relativamente optimistas en toda la eurozona.

 

Durante semanas, muchos comerciantes habían estado pronosticando que el ECB recortaría su tasa principal de interés de su nivel récord a la baja de 0.25 por ciento para impulsar la lenta recuperación económica y evitar deflación. Sin embargo, después de un alza en la actividad empresarial mostrada por encuestas y un crecimiento inesperadamente fuerte de 0.3 por ciento en el último trimestre de 2013, el ECB optó por no adoptar más medidas de alivio.

 

“Como resultado, el mercado juzgó que había disminuido la perspectiva de más estímulos monetarios por parte del ECB en este ciclo”, dijo Jane Foley, estratega en divisas de Rabobank International.

 

El euro ha estado avanzando continuamente desde que se cotizaba alrededor de 1.22 dólares en el tercer trimestre de 2012,cuando el presidente del Banco Central Europeo Mario Draghi dijo que haría “lo que fuera necesario” para salvar al euro.

 

Con menos comerciantes pensando que es posible una desintegración de la unión monetaria, el euro se fortaleció a pesar de que la economía de la eurozona está rezagada con respecto a la de Estados Unidos.