Tras quedarse sin empleo, los cuatro comisionados del IFAI heredarán a sus sustitutos una sede de lujo. De acuerdo con la Auditoría Superior de la Federación, el edificio -ubicado al sur de la Ciudad de México- tuvo un sobrecosto de 108 millones de pesos.

 

En el proyecto original se erogarían 490 millones 208 mil pesos, sin embargo, el Instituto gastó otros 108 millones para terminarlo, lo cual incrementó su costo en un 22%, según la auditoría realizada.

 

El dictamen de la ASF advierte que la adquisición del edificio se dio a través un “contrato de arrendamiento financiero con opción a compra por 20 años”, por lo que en 2032, cuando venza el plazo, se habrían pagado un total de mil 132 millones de pesos.

 

Y el costo podría elevarse considerablemente en los próximos meses debido a que el Instituto realiza actualmente un estudio, producto de la reforma en materia de transparencia, que eleva el número de comisionados de cinco a siete, por lo que tendrán que construirse dos nuevas oficinas para ellos y sus equipos de trabajo.

 

La fiscalización de la Cuenta Pública 2012 revela anomalías en la adquisición de la nueva sede “se considera que dicha opción no fue la mejor para el IFAI, toda vez que se tuvieron que realizar contrataciones para adecuar el inmueble cuyo costo ascendió a 108 millones 933 mil pesos que costaron en conjunto el terreno y el inmueble”.

 

Por lo anterior, la Auditoría Superior exigió al Instituto Federal de Acceso a la Información que investigue a los “servidores públicos que en su gestión optaron por adquirir, mediante un contrato de arrendamiento financiero, un inmueble al que se le tuvieron que hacer adecuaciones” presupuestales.

 

Defienden su alta tecnología

 

El IFAI defendió la adquisición del edificio al referir que se trata de un inmueble certificado por instituciones internacionales, como el Intelligent Bulding Institute, además de que se encuentra en proceso de recibir un reconocimiento por ser sustentable.

 

“Estos edificios inteligentes resultan más caros en su diseño y construcción, pero los beneficios se observan a partir de su operación y mantenimiento, así como de la vida útil del inmueble y que deberá ser la tendencia de desarrollo inmobiliario ante los problemas de carácter que se observan en materia ecológica y energética”, justificó el instituto respecto al aumento del costo por 108 millones de pesos.

 

A pesar de que defendió su nueva sede, la fiscalización federal indicó que las oficinas de Gerardo Laveaga, comisionado presidente, otros dos comisionados, la Secretaría General, la Secretaría de Acceso a la Información y ocho Direcciones Generales, tienen más espacio del requerido para realizar su labor.

 

Otra de las observaciones de la ASF es que no se entregaron los planos “arquitectónico, hidrosanitario, eléctrico, iluminación, aire acondicionado e instalaciones especiales” del nuevo edificio, los cuales, tuvieron un costo de un millón 587 mil 600 pesos y no se acreditó su existencia.

 

Fletes millonarios

 

La Auditoría Superior de la Federación detectó que el IFAI contrató un servicio de fletes para trasladar el mobiliario de su viejas instalaciones a su nueva sede, el cual tuvo un costo de un millón 496 mil pesos. Sin embargo, la empresa contratada no se dedicaba a ese rubro.

 

Por ello, el órgano fiscalizador determinó iniciar una investigación contra los funcionarios que permitieron la “adjudicación directa para la contratación del servicio de traslado del mobiliario, no obstante que el proveedor contratado no incluía este tipo de servicio en su objeto social, además de que tampoco acreditaron las pérdidas y costos adicionales”.

Desfalco

 

Monto en pesos                        Irregularidad
118 millones 933 mil                     Incremento del costo del edificio

Un millón 496 mil                         Pago de fletes a una empresa que no es del ramo

Un millón 587 mil                         Pago de planos arquitectónicos que no aparecen