Río de Janeiro. El fabricante de material deportivo Adidas anunció hoy que retirará del mercado las camisetas lanzadas con motivo del Mundial de fútbol Brasil 2014 que provocaron una polémica en el país sudamericano por su connotación sexual e indignaron al gobierno brasileño.

 

La multinacional, uno de los patrocinadores oficiales del Mundial, informó en un comunicado de que las camisetas formaban parte de una serie especial y limitada lanzada exclusivamente en Estados Unidos y que, por su política de escuchar a los clientes y socios, suspenderá las ventas.

 

Adidas divulgó su nota poco después de que la estatal Empresa Brasileña de Turismo (Embratur) manifestara su indignación y exigiera la retirada de las camisetas y de que la propia presidenta brasileña, Dilma Rousseff, asegurara en su cuenta en Twitter que Brasil está listo para combatir el turismo sexual durante el Mundial.

 

En una de las camisetas, de color verde, aparece inscrita la frase “I love Brasil”, pero dentro de un corazón hay un triángulo que alude a un trasero femenino con un tanga.

 

En otra, de color amarillo, se puede ver a una mujer en bikini junto a la leyenda “Looking to score” (Buscando anotar), lo que pudiera ser entendido como “Buscando chicas”.

 

Embratur rechazó de forma “vehemente” la comercialización de productos “que vinculan la imagen de Brasil a connotaciones sexuales”, en tanto que el presidente de la estatal, Flávio Dino, advirtió que “la explotación sexual es un crimen inaceptable” que “no puede ser confundido de ninguna manera con una modalidad de turismo”.

 

Rousseff, pese a que no se refirió directamente a la polémica, comentó hoy a través de su cuenta en la red social Twitter que el país está preparado para recibir a los turistas que llegarán para el Mundial, que se celebrará entre junio y julio de este año, pero que también lo está para combatir el turismo sexual.

 

“El Gobierno aumentará los esfuerzos en la prevención de la explotación sexual de niños y adolescentes en el Carnaval y en la Mundial”, precisó la jefa de Estado, quien animó a denunciar los posibles abusos.

 

Adidas, por su parte, aseguró que suspenderá la venta de las camisetas en respuesta a los comentarios de rechazo de consumidores y socios. “Es importante aclarar que se trata de una edición limitada que estaría disponible tan sólo para Estados Unidos”, según la nota de la empresa.