En su primera presentación ante una corte en Estados Unidos, después de entregarse a las autoridades, Héctor Javier Villarreal rechazó la fianza y permanecerá en prisión. Esto le permitirá negociar con la fiscalía una disminución de la condena o convertirse en testigo para proporcionar información que permita la detención de personas relacionadas con los cargos.

 

El ex tesorero de Coahuila se presentó, la tarde de ayer, en la corte federal de San Antonio, ante el magistrado Henry Bemporad, para enfrentar la acusación por lavado de dinero. La audiencia concluyó sin que se fijara una nueva fecha para continuar el proceso, informó el sitio MySanAntonio.com.

 

De acuerdo con los fiscales, este dinero es producto del tráfico de drogas, sobornos, fraude y la malversación de fondos pertenecientes al gobierno de Coahuila. De ser encontrado culpable podría purgar una condena de 20 años en prisión.

 

El miércoles,  Javier Villarreal se entregó a las autoridades norteamericanas en El Paso, Texas, y de inmediato fue trasladado a la prisión de San Antonio.

 

En un comunicado difundido por la Oficina del Fiscal del Distrito Oeste de Texas, se explica que desde 2008 Villarreal y otras personas realizaron transacciones financieras relacionadas con la importación, venta y distribución de sustancias controladas.

 

Además, el ex tesorero transfirió fondos, dentro y fuera de los Estados Unidos con el fin de ocultarlos, incluso él y sus cómplices enviaron parte del dinero a una cuenta en el banco N. T. Butterfield and Son Limited, en las Bermudas.

 

Esta cuenta tenía 2 millones 275 mil 544 dólares que fueron asegurados por la Corte del Distrito Sur de Texas.  De esta cuenta se realizaron transferencias que se presume quedaron en manos de familiares, incluyendo a su esposa, con las que compraron  propiedades en San Antonio, Brownsville y la Isla South Padre, se abrieron cuentas bancarias y se establecieron negocios.

 

En diciembre, 24 HORAS publicó que el gobierno de los Estados Unidos buscaba ampliar los decomisos de bienes y cuentas bancarias a cuatro cómplices de Villarreal, bajo el expediente 2:13-CV-00033.

 

Los partícipes fueron identificados como Altagracia Daniela Rodríguez García, Paola Villarreal, Ixtel Botello Schuessler, Héctor Javier Villarreal García y de la empresa Doña Paola, productora de tortillas de harina con sucursales en Matamoros, Coahuila y Brownsville, Texas.

 

En el documento se especifica que la conspiración de Villareal comenzó cuando pidió un préstamo ante una dependencia federal a nombre del Estado de Coahuila, que consiguió porque tenía cómplices que trabajaban en ese lugar. De ese préstamo logró transferir 35 millones de dólares a cuentas bancarias de los Estados Unidos.

 

Lo vinculan al ex gobernador

 

En noviembre de 2013, se presentaron cargos en contra de Villarreal y el ex gobernador de Coahuila, Jorge Torres López, por lavado de dinero. La juez Janice Ellington, de la Corte del Distrito Sur,  ordenó la aprehensión.

 

En este expediente se señala que el ex gobernador transfirió 2.5 millones de dólares a una cuenta en el banco JP Morgan Chase en Texas durante el 2008. A Villarreal se le acusa de mentir a los bancos estadounidenses entre agosto de 2009 y febrero de 2012. Los fondos de las cuentas fueron decomisados.

 

Jorge Torres negó los cargos y exigió el descongelamiento del dinero, alegó que sus propiedades eran producto de su trabajo y que sus abogados se estaban haciendo cargo de este asunto. Sin embargo, hasta la fecha se encuentra prófugo.