El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, caminó este martes hasta el Cuartel de la Montaña, donde reposan los restos del fallecido Hugo Chávez, acompañado por miles de simpatizantes para conmemorar los 22 años del golpe militar del 4 de febrero contra el gobierno de Carlos Andrés Pérez (1989-1993).

 

Fuertemente custodiado y por más de una hora, Maduro, vestido de camisa roja y franela con la consigna “dignidad 4F”, partió desde el centro de Caracas acompañado por su esposa Cilia Flores, la llamada “primera combatiente”, hasta una de las zonas caraqueñas bastiones del chavismo, el barrio 23 de enero.

 

También marcharon el presidente de la Asamblea Nacional y número dos del chavismo, Diosdado Cabello, militar en retiro que participó en el golpe; el vicepresidente Jorge Arreaza, la ministra de la Defensa, Carmen Meléndez, y algunas autoridades de la capital.

 

El 4 de febrero de 1992, fecha que el gobierno bautizó como el “Día de la Dignidad Nacional”, el entonces teniente coronel Hugo Chávez fracasó en su intento de derrocar al presidente Carlos Andrés Pérez, quien en 1989 había impuesto un plan de austeridad y reprimido una rebelión popular contra el aumento del precio del transporte público, que provocó centenares de muertos.

 

La misma noche del golpe, en una alocución televisada, Chávez asumió la responsabilidad por el fracaso del movimiento y aseguró que “por ahora” sus objetivos no habían podido cumplirse. La asonada lo llevó a la cárcel, pero en 1994 fue indultado y en 1998 ganó por primera vez las elecciones.

 

En el trayecto de este martes, los simpatizantes, muchos ataviados de rojo, otros andando en motocicleta, ondearon banderas del oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), mientras otras personas integrantes de movimientos de la sexodiversidad lucían los colores del arco iris.