El gobernador Ángel Aguirre Rivero descartó la intensión del gobierno federal en reglamentar los grupos de autodefensa en Guerrero, tal y como ha sucedido en Michoacán.
Explicó que las policías comunitarias en la entidad están debidamente reglamentadas; asimismo, detalló que la asignación de un posible comisionado en la materia de seguridad está fuera de realidad.
“Los guerrerenses nos entendemos de nuestros propios problemas”, refrió en entrevista con 24 HORAS, momentos antes de participar en la inauguración de la sesión plenaria de los diputados del PRD, celebrada en Acapulco, Gro.
Aclaró que cualquier apoyo de la federación será recibida, siempre y cuando participe con su las labores de su administración.
“Bienvenida la federación en cuanto coadyuve a las acciones de mi gobierno”, sostuvo el político emanado de la izquierda mexicana.
Reconoció que el problema de inseguridad es derivado “al problema de miseria que viven los pueblos de Guerrero”, aunado a la falta de recursos para paliar aún las recientes afectaciones climatológicas en la entidad.
Acusó a las autoridades federales de la administración del Presidente Enrique Peña Nieto en detener la asignación de los recursos económicos para apoyar a las poblaciones afectadas.
“El plan de reconstrucción, y que los recursos que se anunciaron en el Fondo Nacional para Desastres (Fonden) empiecen a aplicarse en Guerrero, han trascurrido cuatro meses y aún esos 30 mil millones no inician su liberación”, reclamó
Sale vivo empresario
Ángel Aguirre Rivero reveló a 24 HORAS que en las próximas horas se reunirá con el empresario y ex dirigente de la Cámara Nacional del Comercio (Canaco) en la entidad, Pioquinto Damián Huato, quien sobrevivió ayer a un atentado en su contra en la capital Chilpancingo.
Se sabe que el empresario regresaba del poblado de “El Ocotito” donde concluyó una participación con integrantes de la policía ciudadana.
En este evento una mujer que lo acompañaba perdió la vida y su hijo, Walter Damián Bautista, resultó herido por orificio de arma de fuego en una mano.
El gobernador Aguirre condenó este hecho e instruyó a la Procuraduría General de Justicia para realizar las investigaciones y “llegar hasta las últimas consecuencias para castigar a los responsables”.