WASHINGTON. Mientras el gobierno de Barack Obama considera poner fin almacenamiento de millones de registros telefónicos por la Agencia de Seguridad Nacional (NSA, por sus siglas en inglés), las autoridades están financiando discretamente estudios para prevenir que intrusos vean detalles de aquellos a quienes se espía.

 

La Oficina del Director de Inteligencia Nacional le está pagando a al menos cinco equipos de investigaciones en todo el país para que desarrollen un sistema para mantener grandes volúmenes de registros telefónicos codificados fuera del gobierno. El proyecto es una de varias ideas que podrían permitir que el gobierno almacene los registros telefónicos de estadunidenses en una compañía de teléfonos o una organización independiente, pero aun así poder revisarlos cuando lo necesite.

 

Bajo el estudio, los datos almacenados estarían protegidos por un código secreto que ocultaría detalles identificadores de la curiosidad de intrusos e incluso de los dueños de las base de datos en cuestión, de acuerdo con documentos obtenidos por The Associated Press y entrevistas con investigadores, ejecutivos corporativos y funcionarios del gobierno.

 

El gobierno ha dado apenas descripciones vagas de los cambios que planea para la colección diaria de registros telefónicos estadounidenses por la NSA, que actualmente son mantenidos por la agencia en sus bancos de datos. Para resolver cuestiones legales, de privacidad y libertades civiles, el presidente Obama ordenó este mes que el secretario de Justicia y altos funcionarios de inteligencia recomienden cambios para el 28 de marzo que permitirían a Estados Unidos identificar posibles llamadas telefónicas de terroristas sin que el gobierno tenga que retener los registros telefónicos.

 

Un panel federal exhortó a Obama que ordene a las compañías telefónicas o terceras partes no identificadas que almacenen los registros. Otro panel dijo que colectar los registros telefónicos era ilegal e ineficaz y llamó a Obama a abandonar el programa.

 

Documentos internos que describen el de Seguridad y garantía de Privacidad no mencionan a la NSA ni su programa de espionaje telefónico. Pero si el proyecto resulta exitoso, su tecnología de búsquedas codificadas podría permitir a la NSA conducir búsquedas protegidas al tiempo que pasa el almacenamiento de los registros telefónicos de sus bancos de datos a los de compañías telefónicas o terceras partes.

 

Un portavoz del Director de Inteligencia Nacional, Michael Birmingham, confirmó que el estudio era relevante para el programa de la NSA. Mencionó “intereses en la comunidad de inteligencia”, pero advirtió que pudiera pasar un tiempo antes de que la tecnología pueda ser usada.