Durante el 2013 cerraron entre 20% y 30% de las casas de empeño establecidas en México por la inseguridad, las supervisiones de Profeco, y la caída en el precio del oro, principal producto empeñado, aseguró Roberto Alor, director general de Prendamex.

 

“El 2013 fue un año difícil no solo para la economía nacional, sino para la actividad prendaria, porque 80% de los empeños son de joyas y relojes y con la caída del precio del oro; se hizo más chico el mercado”, afirmó.

 

Al cerrar una sucursal representa pérdidas financieras e inviabilidad, y eso se dio el año pasado cuando el precio del oro cayó cerca de 30%, dijo el también vicepresidente de la Asociación Mexicana de Franquicias.

 

La violencia registrada por el crimen organizado en Guerrero, Michoacán y Tamaulipas provocó que muchos de los negocios prendarios dejaran de operar, manifestó.

 

Alor recordó que muchas casas de empeño en esas entidades han sido blanco de extorsiones y cobro de derecho de piso por parte de bandas de la delincuencia organizada.

 

En el país existen alrededor de ocho mil instituciones prendarias, pero se hará más pequeño el mercado hasta sólo tener cinco mil 500 casas de empeño en toda la república mexicana, expuso el empresario.

 

En julio de 2013 venció plazo para que las casas de empeño que operan en este país se inscribieran al Registro de Casas de Empeño de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco por lo que tiene la faculta sancionar con multas de hasta dos mil 500 millones de pesos.

 

La Profeco el pasado domingo colocó sellos de suspensión de actividades de El Nacional Monte de Piedad y Fundación Dondé por parte de Profeco.

 

Las supervisiones del organismo han permitido el cierre de casas de empeño irregulares, que suman entre 10 y 20%, del total de establecimientos derivados a la actividad prendaria, dijo el directivo.

 

“La regulación que se está estableciendo al sector va a significar la reducción de casas de empeño, porque no van a poder seguir operando”, manifestó.

El director de la casa de empeño con deuda emitida en la Bolsa Mexicana de Valores dijo que el préstamo prendario es una alternativa para las personas que carecen de algún servicio financiero bancarizado.

 

Aproximadamente, 15% de los consumidores que participa en el sector bancario recurre al empeño porque tiene saturadas sus tarjetas, agregó el responsable de las 828 casas de empeño Prendamex que operan en México.

 

“La cuesta de enero es una temporada en la cual el sector prendario registra un incremento de 10%”, dijo.

 

Anticipó que la llamada cuesta se extenderá hasta el próximo mes de marzo, debido a los cambios fiscales aprobados por el Congreso de la Unión que golpeará el bolsillo de los mexicanos, manifestó Alor.

 

El monto de empeño en esta temporada es de mil 100 pesos, y se estima que la casa de empeño atenderá a poco más de 2 millones de personas de enero a marzo.

 

En 2014, Prendamex abrirá 10 sucursales propias y 20 por franquicias, cada una con una inversión de un millón de pesos.