Oculus Rift es la última experiencia en realidad virtual, encaminando la próxima generación de artículos para videojuegos en algo más inmersivo.

 

El casco de realidad virtual más exitoso hasta la fecha presentó una nueva variante en Las Vegas aún más sofisticada. El modelo 2014, llamado Crystal Cove , está basado en el prototipo exhibido el año pasado en el E3, pero cambiando la tecnología LED del original por OLED e incorporando ahora una cámara externa y unos marcadores para que sea posible capturar tu situación en un espacio tridimensional.

 

Con todo, probablemente la mejora más importante no es visible a los ojos de los espectadores: Oculus Rift ha eliminado el motion blur, que es uno de los principales obstáculos para disfrutar con este tipo de dispositivos.

 

Oculus usó EVE Valkyrie para ilustrar en el CES las nuevas posibilidades abiertas por el hardware de Crystal Cove. EVE Valkyrie coloca los mandos de un caza espacial con una cabina totalmente inspeccionable.

 

Todos los mandos cuentan con sus propias inscripciones y advertencias, pero el texto de las mismas era ilegible hasta la creación de Crystal Cove por culpa del efecto motion blur, que opaca las pantallas al mover la cámara y elimina los detalles más finos.

 

El control de cámara de Oculus Rift es capaz de seguir los movimientos de tu cabeza con una precisión hasta ahora imposible.