Guardias de honor permanecieron junto al ataúd del inventor ruso Mijail Kalashikov, el cual se encontraba envuelto por la bandera nacional antes de ser sepultado en un cementerio militar ubicado en las fuera de Moscú.

 

Tres disparos al aire provenientes de rifles de asalto AK-47 fueron ejercidos en honor al creador de esta arma automática, utilizada tanto por ejércitos regulares como guerrillas alrededor del mundo.

 

El mandatario ruso Vladimir Putin ofrendó un ramo de rosas rojas que colocó al pie del féretro y observó la imagen del ingeniero en armas.

 

Más de 60 mil personas asistieron al entierro, entre ellos los principales mandatarios rusos como el ministro de Defensa, Serguei Shoigu, el jefe de la administración presidencial, Serguei Ivanov y varios responsables militares, así como civiles que presenciaron la ceremonia en el memorial de Mytishchi, panteón en el que se encuentran enterrados hombres ilustres rusos, particularmente militares.

 

El nombre de este hombre “Se ha convertido en un símbolo de la fiabilidad y de la gloria del ejército ruso”, declaró Shoigu en un mensaje que envió a los familiares de Kalashikov.

 

Muere un gran inventor

 

Kalashikov fue ingresado el pasado 17 de noviembre a la unidad de cuidados intensivos del hospital regional de Udmurtia en condición seria debido a una hemorragia gástrica que fue detenida con una cirugía, de acuerdo con despachos de la agencia de noticias Itar-Tass.

 

El ministro de Salud de Udmurtia, Vladimir Muzlov, indicó por su parte que en el transcurso de terapia intensiva Kalashikov había experimentado procedimientos de recuperación, esta en condición seria, pero estable”. En junio pasado, el famoso diseñador fue sometido a una intervención quirúrgica en Moscú en la cual le fue implantado un marcapasos.

 

Kalashnikov es el creador del fusil automático epónimo que durante más de medio siglo no ha sido superado en calidad. “Será el primero a la mano de la persona que quiera el mejor rifle”, dijo hace 30 años. Aun cuando en últimas fechas Izmash, la firma fabricante, pasa tiempos difíciles por la caída de pedidos del ejército ruso y la piratería.

 

El Kalashnikov parece ser el símbolo de la tecnología rusa.

 

En 1947 diseñó su más famosa arma y desde entonces más de 100 millones de unidades han sido fabricadas, incluso es el fusil más utilizado en la actualidad por las agencias de seguridad de más de una centena de países.

 

La simplicidad comparativa del AK-47 lo hizo fácil de fabricar, así como fiable y fácil de mantener, por lo que se convirtió en la emblemática arma soviética de la segunda mitad de este siglo.

 

El auténtico AK-47 pesa 4.3 kilogramos, su longitud es de 870 milímetros (mm), la longitud del cañón es de 415 mm y el calibre es 7.62 mm. La cadencia de tiro es de 600 disparos por minuto y el cargador extraíble curvo tiene capacidad para 30 cartuchos.

 

Kaláshnikov afirmó que en su arma nada sobra: “Cada una de las nueve piezas pide que la instalen en el lugar que está destinado solo para ella”.

 

El fusil es tan simple que en la desaparecida Unión Soviética enseñaban a armarlo y desarmarlo en las escuelas primarias. El arma se puede sumergir en el agua y lanzar al barro sin que su seguridad y fiabilidad se vean perjudicadas.

 

Aunque honrado por el Estado, Kalashnikov hizo poco dinero de su arma, ya que años después él dijo una vez que hubiera diseñado una cortadora de césped.