Sus pequeños cuerpos de niños de entre 10 y 12 años de edad resguardan la fuerza y el poder que los llevaron a ser los “campeones descalzos” en una tierra que no era la suya, Argentina.

Originarios de una de las zonas reconocida como de las más pobres del país, donde los álgidos conflictos han enlutado a decenas de familias, los niños triquis transforman su imagen; hoy son figuras internacionales por sus triunfos en el baloncesto.

Ellos son los campeones del cuarto Festival Internacional de Minibásquetbol en Buenos Aires, Argentina, conócelos: