Francisco Rafael Arellano Félix, fundador del casi extinto Cártel de Tijuana, fue ejecutado este viernes en una fiesta infantil que se celebraba en Cabo San Lucas, Baja California Sur.

 

Nacido el 24 de octubre de 1949, el mayor de los siete hermanos que conformaron el poderosos grupo de delincuencia organizada, ha sido procesado  por su actividad ilícita, tanto en Estados Unidos como en México.

 

Arellano Felix fue capturado por primera vez en el año 1980, en San Diego, California, luego de intentar venderle cocaína a un agente de encubierto de la Administración de Cumplimiento de Leyes sobre las Drogas (DEA, por sus siglas en inglés); tras el suceso, logró evadir a la justicia norteamericana con el pago de una fianza.

 

Trece años después, el mayor de los capos más buscados de la década de los 90, fue detenido nuevamente, esta vez, por la Policía Federal en Baja California; de este arresto, se desprendió un proceso legal por el cual, Arellano Félix fues sentenciado a 10  años en prisión por portación de armas y tráfico de estupefacientes.

 

Mas tarde, el año 2004, casi de manera inmediata al final su sentencia, el capo fue notificado sobre sus cuentas pendientes con el sistema penal estadunidense, lo derivó en una extradición.

 

En 2006 es trasladado a EU y un año después es sentenciado a 6 años de prisión, sin embargo, para 2008, Arellano Féliz dejó las cárceles del país del norte gracias a su buena conducta.

 

Este viernes, autoridades confirmaron que el capo de la droga fue ejecutado en el Hotel Marbella de Cabo San Lucas durante una fiesta familiar, a manos de un sicario que presuntamente le disparo en dos ocasiones, una en el tórax y otra mas en la cabeza.