Fuerzas del ejército y de la policía egipcia  han lanzado un asalto sobre la localidad de Kerdasa, junto a El Cairo, cuyo control estaba en manos de los grupos islamistas y de los Hermanos Musulmanes.

Poco antes del comienzo de la operación, las fuerzas de seguridad cercaron con vehículos blindados los accesos y las salidas a Kerdasa, que fue escenario de una masacre de una comisaría de policía el pasado 14 de agosto, cuando los seguidores del expresidente Mohamed Mursi fueron desalojados con violencia de las plazas donde se manifestaban.

De acuerdo con fuentes policiales, el dispositivo de seguridad consiguió una rápida aplicación del bloqueo sobre esta pequeña ciudad de la periferia cairota tras la entrada en vigor, como cada día, del toque de queda impuesto a partir de las 23 horas.

 

Las fuerzas de seguridad alertaron a través de altavoces a los vecinos de Kerdasa de no salir a la calle o a los balcones de sus casas. Las fuentes insistieron en que la operación “no está dirigida contra los vecinos de Kerdasa, sino contra objetivos predeterminados y minuciosos”.