BOGOTÁ. El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) anunció que ejecutará un plan de ayuda para brindar educación a cerca de cuatro mil 700 niños colombianos que se han refugiado en Ecuador a causa del enfrentamiento guerillero, que ha desplazado a un total de cuatro millones de personas.

 

La organización informó que de los cerca de cuatro millones de colombianos que han tenido que abandonar sus hogares por causa del enfrentamiento bélico, más de 300 mil se han refugiado en Ecuador, que, con 55 mil personas en su territorio, acoge la mayor cantidad de refugiados de Latinoamérica.

 

Acnur calculó que de 12 mil 838 de los refugiados en Ecuador, 23 % son niños y adolescentes y alerta sobre las dificultades educativas que afrontan para conseguir uniformes y materiales, así como para resolver problemas administrativos, como inscribirse en escuelas ecuatorianas, entre otros.

 

Testimonios y dibujos de algunos niños sobre su situación, fueron recopilados por la Acnur para ser difundidos en el contexto del programa que planea ejecutar y que será financiado por la Unión Europea y beneficiará a cerca de cuatro mil 700 menores en Ecuador y Colombia.

 

“Estoy en Ecuador, yo me siento mal, porque todas las niñas se conocen, pero yo no. Por eso a veces me dan ganas de llorar y yo quiero regresar”, relata Erica, de 12 años, quien cuenta su experiencia como refugiada.

 

El representante de Acnur en Ecuador, John Fredrikson, dijo que en ambos países “hay garantías muy importantes en materia de derechos como el de la educación sin distinción de nacionalidad ni estatus migratorio”, pero en realidad para estos niños, “las cosas son más complicadas”.

 

Explicó que el proyecto “trata de garantizar que esos derechos, que ya están articulados, se hagan realidad, para que los niños tengan acceso a la educación y disminuyan las tasas de discriminación” que se producen en la convivencia entre menores de distintas nacionalidades.

 

Sobre la iniciativa, dotada con 500 mil euros, prevé apoyo económico a las familias, apoyo social en aspectos relacionados con la convivencia y la integración, actividades con profesores, deportivas y de otro tipo, explicó Fredrikson.

 

Entre las acciones se incluye, además, la concesión de becas, renovación de escuelas y entrega de materiales y uniformes.

 

Acnur puso en marcha el programa en coincidencia con el inicio del curso escolar. “Es el momento oportuno, cuando inicia el año escolar, de reenfatizar esta campaña y no esperar que surjan problemas, sino actuar de forma preventiva”, comentó el representante de la agencia.

 

Por su parte, la UE, que obtuvo el Premio Nobel de la Paz en 2012, ha destinado los recursos económicos del galardón a la iniciativa “Niños de Paz”, que favorecerá la educación de 23 mil niños afectados por conflictos en el mundo y que incluye el proyecto puesto en marcha en Ecuador y Colombia.