La Administración Federal  de Alimentos y Medicinas de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) redobló la vigilancia sobre los productos de hoja verde que entran a ese país desde México.

 

Esto, tras el brote de ciclosporiasis (una enfermedad estomacal) que la agencia detectó en 19 estados de la unión americana, presuntamente por el consumo de ensaladas producidas y enviadas desde una planta procesadora de alimentos en Guanajuato.

 

Al respecto, el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) informó que en conjunto con la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) y personal de la FDA, que se encuentra en México, realizan una investigación para determinar el riesgo de los vegetales nacionales.

 

Los resultados de la averiguación se darán a conocer en al menos 15 días, una vez que se realicen las pruebas pertinentes en laboratorio, por lo que la Senasica no emitirá una postura sobre el asunto hasta no tener evidencia que demuestre que los productos de hoja verde mexicanos están contaminados o si hay riesgo sanitario en alguna otra región del país, respondió personal de comunicación de la dependencia.

 

Por otra parte, la FDA anunció que Taylor Farms México, empresa proveedora de las ensaladas que provocaron la infección de más de 500 ciudadanos estadunidenses, suspendió el 9 de agosto,  de manera voluntaria, la producción y el envío a Estados Unidos de cualquier mezcla de ensalada o sus componentes provenientes de sus operaciones en México; esto, hasta que la investigación concluya.

 

Este diario buscó a la compañía, pero la respuesta fue que no habrá pronunciamiento al menos esta semana. Sin embargo, la FDA informó que realiza una evaluación ambiental de la planta de procesamiento de Taylor Farms en México, con las facilidades otorgadas por la empacadora, con el fin de rastrear la causa probable del brote de ciclosporiasis e identificar los medios de prevención para que éste cresa.

 

ENFERMEDAD FOCALIZADA

 

Según el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), hasta el 12 de agosto había recibido la notificación 535 casos de infección por parte de los departamentos de salud de Iowa, Nebraska, Texas, Wisconsin, Arkansas, Connecticut, Florida, Georgia, Illinois, Kansas, Louisiana, Minnesota, Missouri, New Hampshire, Nueva Jersey, el estado de Nueva York, la ciudad de Nueva York, Ohio y Virginia.

 

La ciclosporiasis se da regularmente por beber o nadar en agua contaminada con excremento o al alimentarse de frutas frescas o vegetales que no han sido lavados correctamente. La enfermedad infecta al intestino delgado y causa diarrea, pérdida sustancial de peso, cólicos estomacales, nausea, vómito, dolor muscular, fiebre de bajo grado y fatiga, entre otros síntomas.

 

Los focos epidémicos de ciclosporiasis en países desarrollados se asocian con mayor frecuencia a la ingesta de productos alimenticios perecederos importados como frambuesas, zarzamoras, albahaca, chícharos y lechugas de Latinoamérica; sin embargo, también hay reportes de brotes ocasionados por productos locales en dichos países, revela el Departamento de Microbiología y Parasitología, de la Facultad de Medicina de la UNAM.